Oumou y Abramane, por fin juntos
La madre y el niño marfileños, llegados a España en dos pateras diferentes, se reencuentran tras 7 meses separados
Las dificultades puestas por el área del menor de Melilla para la reagrupación familiar provocaron la intervención del Tribunal de Estrasburgo
Madrid
“Cuando me ha visto ha corrido hacia mí, me ha abrazado, le he preguntado quien soy y me ha dicho ¡mamá!, en una mezcla de francés y español, estoy muy muy contenta, hoy es un día de alegría pero al verle al principio no me creía que tuviera a mi hijo al lado lo miraba y lo miraba y no me lo creía” explica Oumou emocionada, en declaraciones a la Cadena SER, tras compartir las primeras horas con su hijo casi 8 meses después de haberse separado de él en Marruecos.
Siete meses después de haber llegado a España en dos pateras diferentes, de luchar mostrando la partida de nacimiento del niño, el libro de familias o las fotos juntos desde que Abramane era un bebé, Oumou ha podido al fin abrazar a su hijo.
“Estoy muy muy contenta hoy, he visto a mi niño, él estaba feliz al verme y yo también, es como si hoy volviera a comenzar mi vida, muy muy contenta pero ha sido duro todo este tiempo. Al verle he comprobado que ya no entiende francés, sólo español pero bien, me gusta que ya hable español” cuenta esta madre que no se separa de su niño ni un momento, y que confiesa estar un poco agobiada con que el pequeño casi haya olvidado totalmente en francés aunque confía en que lo recupere y en que ella aprenda español igual de rápido que el niño.
El reencuentro se ha producido en la Consejería de Bienestar Social de Melilla encargada de la tutela del pequeño de 4 años y que hasta ahora "había dificultado" la reagrupación familiar, según la denuncia reiterada de esta madre marfileña.
Una vez que las pruebas de ADN han corroborado el parentesco y sobre todo a raíz de las presiones del Tribunal Europeo de Derechos Humanos a España tras las denuncias presentadas por Womenslink y la Merced de las Migraciones, en torno a las once de la mañana se ha llevado acabo la reintegración familiar.
El único contacto que habían mantenido se produjo hace solo unos días cuando también por exigencia de Estrasburgo se permitió a Oumou hablar con su hijo vía videoconferencia. El defensor del pueblo había exigido a Melilla en reiteradas ocasiones que se tomaran medidas para que la madre y el niño estuvieran juntos. Por otro lado, las ONG que han ayudado a Oumou con las denuncias, estaban convocadas hoy en un juzgado de instrucción de Melilla para litigar contra la Ciudad Autónoma, pero tras la reintegración familiar, el juicio ha quedado suspendido.