El 'triple invisible' de Manu Ginóbili

A los 40 años, Manu Ginóbili sigue haciendo de las suyas, dejando una de las jugadas más curiosas que se podrán ver a lo largo de esta temporada en la NBA. El escolta bahiense, realizó una acción al alcance de muy pocos que bien le valió una ovación del mítico Madison Square Garden. Una más.

Durante el tercer cuarto en el partido que enfrentaba a San Antonio Spurs y New York Knicks, el veterano jugador argentino volvió a sacar esa varita mágica que le hace ser un jugador diferente al resto. El escolta argentino intentó asistir a LaMarcus Aldridge, pero su envío se acabó convirtiendo en una canasta que todos vieron excepto los árbitros por lo que el partido se siguió jugando como si no hubiese entrado pese a las protestas de Ginóbili y la sonrisa irónica de Gregg Popovich en el banquillo, que sonreía sin dar crédito a lo que estaba sucediendo.

Tal fue el revuelo que los jueces revisaron la jugada por vídeo, mientras el "20" estalló de bronca y solicitó saber porque no habían cobrado su nueva obra de arte que finalmente acabó subiendo al marcador.

Esta vez una jugada repleta de suerte y magia a partes iguales. Reversos, botes entre las piernas o mates a aro pasado a una mano. La leyenda argentina, pieza clave de la Generación Dorada, parecía que no podía asombrarnos de ninguna otra forma, pero vaya si lo hizo. Decían que estaba acabado, que su físico no daba para más, le quisieron retirar antes de tiempo, pero la la leyenda argentina lo volvió a hacer. Pieza clave para que los San Antonio Spurs lograran la victoria por 100-91 ante los New York Knicks y alcanzasen su victoria 26 en lo que va de temporada.

Manu totalizó 12 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias en los 23 minutos que estuvo en pista. El escolta terminó siendo protagonista de la noche con una jugada involuntaria que algunos catalogaron como "el triple invisible".