Willian, a la tercera fue la vencida

El jugador brasileño del Chelsea fue durante 60 minutos un dolor de cabeza enorme para el Barça. Su movilidad, su libertad, su capacidad para sorprender supuso todo un reto para la zaga blaugrana, que fijo sus miras en Hazard y Pedro, dejando al brasileño con espacio para poder chutar a portería. Seguramente lo más peligroso del ex del Shakhtar. 

Willian avisó dos veces. Chutó una primera vez al poste izquierdo de Ter Stegen, la pelota describió una parábola perfecta y salió repelido ante el suspiro de todos los jugadores del Barça. Lejos de ser aquello una acción aislada, unos minutos después el jugador brasileño repitió el ritual. Esta vez su disparo golpeó en el otro poste bajo la mirada de Ter Stegen.

A la tercera ya no hubo bromas. Era la más difícil y la que terminó entrando. Un córner mal defendido por el Barça dejó solo a Willian en la frontal, que tuvo que recortar, acomodarse y lanzar un derechazo de fuera hacia adentro que sorprendió a Marc André Ter Stegen. 1-0, a la tercera fue la vencida.