Diego López y los palos impiden la primera victoria de Seedorf
La suerte es esquiva al Deportivo, que fue mejor que el Espanyol, pero sigue sin ganar con su nuevo entrenador
La mala suerte se ha cebado con el Deportivo (0-0) ante el Espanyol en el partido que abrió este viernes la jornada 25 de LaLiga Santander, en el que estrelló dos balones en el poste y desperdició un penalti.
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El Deportivo fue más ambicioso, pero no pudo conseguir los tres puntos que ansiaba y ya son diez jornadas consecutivas sin ganar, mientras que el Espanyol lleva siete y ha empatado los cuatro últimos partidos del campeonato.
En el césped de Riazor se citaban dos equipos con dudas y con necesidad de cambiar sus dinámicas negativas, aunque las urgencias eran evidentemente mayores en los locales, que quisieron mandar pronto un mensaje a su rival con un disparo lejano de Mosquera, una de las tres novedades del once de Clarence Seedorf, que atajó Diego López en el primer minuto.
El técnico deportivista decidió pasar a Krohn-Dehli, uno de los fichajes invernales, de la titularidad a la grada, y dejó en el banquillo al ghanés Sulley Muntari, que horas antes del partido había conseguido la documentación necesaria para formalizar su inscripción en LaLiga.
Seedorf dejó el ataque en manos de su tridente ofensivo (Lucas, Adrián y Andone) y situó en el enganche al argentino Fede Cartabia por el sancionado Bakkali, una posición que alternó con Lucas Pérez, caído a banda derecha.
El Deportivo aplicó la intensidad que demanda su entrenador, aunque a veces de manera desmedida, como en una durísima entrada de Florin Andone a Víctor Sánchez que le costó una tarjeta amarilla más que merecida al delantero local.
El Espanyol fue de menos a más y dispuso de una ocasión clara para adelantarse en el marcador a los 24 minutos con un centro desde la banda derecha de Esteban Granero que el brasileño Leo Baptistao, libre de marca en el segundo palo, remató por encima de la portería de Rubén Martínez.
Los coruñeses fueron incapaces de tejer en ataque y abusaron de los saques en largo de su guardameta, que casi siempre acabaron en manos de su oponente.
A falta de juego, la mejor arma de los deportivistas fue la presión y las transiciones rápidas al contragolpe. Así llegaron sus dos ocasiones más nítidas hasta el descanso.
Antes de la media hora de juego, entre Andone y Lucas Pérez le robaron el esférico al colombiano Carlos Sánchez en el centro del campo y los dos montaron una contra que culminó Fede Cartabia con un disparo al poste. Por tercer partido consecutivo el Deportivo volvía a encontrarse con la madera.
Poco después, Mosquera, tras un robo en campo propio, permitió a Andone cogerle la espalda a la zaga rival con un pase de 40 metros y el delantero, en su intento por ver portería, cruzó en exceso el esférico.
El Espanyol respondió al Dépor de la misma forma. Piatti le robó la cartera a Juanfran y su centro lo cabeceó fuera Baptistao a ocho minutos para la conclusión del primer tiempo.
El Deportivo dejó más espacios en el segundo tiempo cuando los jugadores de ataque rebajaron su aportación defensiva y tuvo que cortar con faltas, cargándose de amarillas, las réplicas del Espanyol.
Los coruñeses tuvieron la mejor oportunidad para desnivelar el marcador con un penalti de Granero a Lucas Pérez a los 63 minutos, pero el delantero no pudo convertirlo. Diego López adivinó su intención, se lanzó a la derecha y atajó en dos tiempos para decepción de Riazor y de su '7', que no está teniendo el rendimiento que de él se esperaba.
Los locales no acusaron el golpe e insistieron, pero sin éxito. Adrián se precipitó en el área tras un error de Duarte, lo buscó Luisinho con un disparo lejano, Andone, de cabeza, estrelló otro balón a la madera, y Diego López atajó un lanzamiento de Lucas Pérez y otro de Juanfran para evitar que el Dépor rompiera su racha y para sumar el cuarto empate seguido del Espanyol.