Calixto Bieito: "Una violación simboliza la aniquilación de la humanidad"
El Teatro Real estrena 'Die Soldaten' de Zimmermann, dirigida por Calixto Bieito, una ópera que simboliza los horrores y aberraciones concebidos por el hombre a lo largo del siglo XX
Madrid
Calixto Bieito lleva a escena Die soldaten, de Bernd Alois Zimmermann, escrita tras la II Guerra Mundial, en los años de la Guerra Fría, con 120 músicos y 16 solistas en el escenario del Teatro Real, dirigidos por Pablo Heras-Casado.
Bieito coloca a la orquesta sobre una instalación con forma de andamio y viste a los músicos con uniformes de combate: "Coloco a la orquesta en el escenario porque la protagonista de este espectáculo es la música, una música que tritura a los personajes, y los instrumentos son armas de fuego, las percusiones son cañones y la orquesta va arrastrando a los personajes hasta la extenuación".
Para Heras-Casado, esta ópera de Zimmermann, considerada históricamente "irrepresentable" por su complejidad, exigencia y monumentalidad, "es un desafío, el reto más extremo al que un músico se puede enfrentar. Es un acontecimiento histórico presentar en España esta obra fundamental. Todo en esta obra es extremo y forma parte de lo utópico. Para esta ópera, Zimmermann se planteó poner en escena todos los posibles e imposibles".
Para el director de escena Calixto Bieito, "si algo ha caracterizado al siglo XX desde un punto de vista negativo es que jamás ha habido en la historia de la humanidad la posibilidad de ver tal cantidad de horrores, aberraciones y maldades; Zimmerman, que lo conoció en primera persona, los refleja como nadie, es un abismo de brutalidad". Un abismo, añade, representado en la trágica historia de Marie, la protagonista de Die Soldaten, "un personaje naif, simple y muy auténtico que sufre un proceso de degradación y de destrucción por toda la sociedad que la rodea, incluso por la familia, hasta el punto culminante de sufrir una violación". Marie, dice, "expresa el grito de horror de todo el siglo XX".
Sobre el valor simbólico que tiene la violación de Marie, el director explica que "una violación es algo terrorífico y simboliza la destrucción de la humanidad, la aniquilación". Sobre si su trabajo en estas últimas semanas de ensayos ha sido permeable a sentencias como la de La Manada, Bieito (también director artísitico del Teatro Arriaga de Bilbao), contestaba: "no comento temas de actualidad, ya no vivo en España y esta pieza la dirigí en 2013". La producción que llega el 16 de mayo al Teatro Real fue estrenada por Bieito ese año en la Ópera de Zurich.