¿Cómo funciona el mercado de fichajes en la NBA?

Madrid

En apenas dos días todo ha cambiado en la NBA. Si ayer el mundo se paralizaba con el fichaje a gritos de LeBron James por Los Ángeles Lakers, hoy se amanece con otro bombazo que puede romper la liga: la incorporación del pívot DeMarcus Cousins a los vigentes campeones, Golden State Warriors. Con esto la franquicia de Curry, Durant y compañía refuerzan la única posición del quinteto que nunca estuvo cubierta con garantías. La refuerzan con un jugador all-star que, si las lesiones le respetan, es uno de los mejores pívots en activo del mundo.

Si en los últimos cuatro años, Warriors y Cleveland han sido los reyes de The Finals, el fichaje de Cousins no ha dejado indiferente a nadie y las primeras reacciones ya han aparecido. Se habla de un equipo invencible y que esta incorporación no hace más que perjudicar a la competición y potenciar el papel hegemónico de los de la bahía. Bien es cierto que solamente ha firmado por un año, pero para muchos eso significa que la liga esta temporada ya ha terminado en este mismo mes de julio, con los Golden State Warriors como campeones de nuevo.

La cuestión sobre lo que ha pasado estos dos días, y lo que aún queda, responde a que el pasado 1 de julio de inició el mercado de agentes libres en la NBA. Esto significa que se inició el mercado de fichajes, propiamente dicho. ¿Cómo funciona este mercado? ¿cuáles son los límites? ¿qué normas tiene?

La NBA cuenta con una variedad compleja de fórmulas y conceptos acerca del trasvase de jugadores de uno a otro equipo. En su esquema más básico, en los contratos no existen cláusulas de rescisión como en el fútbol. Esto se debe a que los jugadores, realmente, tienen un acuerdo con la liga y no con las franquicias mismas. De esta manera, cuando salta la noticia de que LeBron ha firmado 4 años por 154 millones de dólares, el jugador en ese tiempo tiene garantizado esa suma de dinero, salvo algún caso muy excepcional. Independientemente de si permanece todo ese tiempo en Los Ángeles o se marcha a otro equipo, el King va a cobrar esa cantidad, dado que el equipo que quiera hacerse con sus servicios va a tener que garantizarle ese dinero que había firmado.

En lo NBA, los jugadores tienen una consideración mucho más de mercancía que en el fútbol. Por ello, no son extraños los trueques de piezas entre franquicias. De esta manera, si un jugador tiene aún años de contrato y deciden traspasarlo, el equipo podrá recibir uno o más jugadores a cambio, pero siempre garantizándoles el dinero que tenían firmado. Este hecho es el máximo exponente de consideración de la NBA como un negocio, donde no se tiene en cuenta la voluntad de los jugadores. Este fue el caso de Isaiah Thomas el año pasado, cuando sin saberlo recibió la llamada del manager de los Celtics para informarle que iba a ser traspasado a Cleveland por Kyrie Irving.

Otro concepto clave es el de límite o tope salarial. Para evitar la acumulación de grandes estrellas en un equipo (aunque no ha funcionado del todo bien con los Warriors) la NBA impone un suelo salarial mínimo que todas las franquicias se deben gastar en sueldos para los jugadores, algo que rondaría los 89 millones de dólares. Como máximo, el techo salarial alcanzaría los 99 millones. No obstante, esta cifra suele ser superada por normas y estrategias de los equipos, alcanzando el verdadero tope que sería de 119 millones de dólares. La NBA impone serias multas a los equipos que superen esta cifra.

Los contratos en esta liga son un mundo entero de opciones. Una de las palabras más oídas es la llamada “player option”. Este es una opción que tiene el jugador de renovar por un equipo cuando sus temporadas garantizadas ya han terminado. De esta manera, un jugador puede aceptar la player option que ya tenía acordada con la franquicia, bajo esas condiciones, o rechazarla para convertirse en agente libre y poder volver a firmar incluso por el mismo equipo, pero con unas nuevas condiciones, es decir, por más dinero.

Uno de los últimos conceptos en este glosario básico es el de agente libre restringido. El mejor ejemplo es el del actual interior Clint Capela. Pívot de los Rockets que se rumorea que podría irse a los Lakers con LeBron. El problema este jugador es una agente libre con restricciones, lo que quiere decir que la franquicia de Houston tiene algo así como los derechos del jugador, por lo que puede igualar cualquier oferta (en un plazo de 48h) que tenga ese jugador.

La NBA es un mercado complejo, donde en pocos días, una plantilla puede cambiar casi por completo y con ello sus posibilidades de levantar el anillo de campeones. Después de estos dos últimos días, se avecina un verano de muchos movimientos.