El Movistar no da con la tecla

Madrid

El Movistar no puede con el Tour. Se podría reducir a que no puede con el Sky, pero realmente solo han conquistado una vez la ronda gala en los últimos 23 años. Fue en 2006 con Óscar Pereiro, cuando el conjunto dirigido por Eusebio Unzúe estaba patrocinado por el Caisse d'Epargne. Antes, hay que remontarse a Induraín para ver éxitos de la escuadra española en Francia, cuando el equipo era el Banesto.

Han estado muy cerca en los últimos años. Cuando se hizo evidente que a Alejandro Valverde le faltaba un 'plus' para ser un verdadero aspirante a conquistar la ronda gala, llegó la esperanza con Nairo Quintana.

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En 2013 cuajó una ronda sensacional y acabó en segunda posición. Repitió puesto en 2015, esta vez haciendo sufrir a Froome en Alpe d'Huez y terminando a algo más de un minuto del británico, en el que ha sido la ronda gala en la que más ha sufrido el tetracampeón hasta la fecha. Además ese año Valverde hizo tercero y el pódium hacía presagiar que una nueva conquista del maillot amarillo no tardaría en llegar. 

Los tres líderes en 2018

De momento no ha sido así. En 2016, el colombiano solo llegaba al tercer puesto, y el año pasado se hundía al no tener a Valverde protegiéndole las espaldas y tras llegar de un Giro muy duro. 

Con la llegada de Mikel Landa en la presente edición se habría una nueva posibilidad, pero también la polémica. Landa y Quintana pelearía entre bastidores por el liderato del conjunto telefónico mientras Valverde, perro viejo ajeno a polémicas, huía de confrontaciones y aseguraba que su momento para conquistar el Tour ya había pasado.

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El murciano ha demostrado estar a disposición de sus teóricos líderes. Pese a ser el mejor situado en la general tras la primera semana atacó en la segunda ronda alpina a falta de 60 km y en la etapa de Alpe d´Huez se metió en la fuga. Sin embargo y pese a contar con una leyenda de sus características como gregario, Landa y Quintana han fallado. Ambos se dejaron tiempo en la primera semana (sobre todo el colombiano), ninguno ha estado con los mejores en la alta montaña y solo Landa aguantó a duras penas en la llegada del pasado miércoles.

El Movistar tenía tres líderes a principio de la ronda gala y ahora ninguno de ellos tiene opciones reales de ganar el Tour. Landa se encuentra a más de tres minutos, nairo a más de cuatro y Valverde, incansable, a más de nueve. Eso sin contar con la crono, donde gente como Froome, Thomas o Domoulin pueden dar un duro correctivo a los Movistar, sobre todo a Landa y Quintana, que sufren mucho en este terreno.

¿Es Quintana el problema?

Se ha hablado mucho sobre los líderes del Movistar, y se ha criticado mucho a un Nairo que para algunos se está convirtiendo en la eterna promesa. Pero, ¿es justa esta apreciación? Nairo ha corrido cuatro veces el Tour y ha hecho podium en todas menos en la desafortunada última edición. El colombiano además ha conquistado una etapa del Tour, dos maillots de mejor joven y  uno a mejor escalador. Y es campeón de la Vuelta y del Giro. De los tres supuestos jefes de filas del Movistar, es el que mejor palmarés tiene en las Grandes Vueltas.

Landa, al que todo el mundo le augura un buen futuro, hizo pódium en un Giro (2015) e hizo un gran último Tour a pesar de quedarse fuera del pódium por poco, pero con la misma edad del colombiano es un hecho que su currículum está aún lejos del de Quintana.

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Valverde  es un caso aparte. Con una Vuelta a España y pódium y etapa en las tres grandes, el murciano ya ha cumplido sus expectativas en las grandes y sigue ganando una carrera tras otra con 38 años, aunque en el Tour se sacrifique por sus compañeros.

Tampoco hay que olvidar que antes de Quintana, contra el Sky ha naufragado corredores de la talla de Contador, Evans o Nibali. El colombiano, igual que Landa, tiene sus mejores años por delante y si mejora contra el crono puede dar problemas al británico en las próximas ediciones. Además no podemos dejar pasar que ha sido el único en poner en problemas reales a Froome en el Tour.

De momento, en esta edición lo tienen difícil y aunque el futuro sigue siendo esperanzador, el tiempo pasa y el Movistar no da con la tecla.