La Vuelta nunca defrauda

La Vuelta a España 2018 ha echado el telón con una nueva edición para el recuerdo. Una vez más, la ronda no decepciona y se postula como una de las carreras favoritas para los aficionados. El dominio den los últimos años del Sky en el Tour hace que los espectadores miren hacia otras carreras, y ahí la Vuelta no decepciona.

La nueva edición ha confirmado a Simon Yates como el gran ciclista que ya muchos pensaban que era. El desfallecimiento del Giro le dejó con la miel en los labios, pero en la Vuelta no se dejó sorprender y aunque sus rivales le han intentado ponerle en problemas, el británico se ha mostrado como el más fuerte y ha obtenido una victoria muy merecida.

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Además, el ciclismo británico hace historia. Con las victorias de Froome y Thomas este año las tres grandes han sido para los ingleses, que además llevan cinco grandes consecutivas tras las victorias de Froome en Tour y Vuelta el año pasado. El nuevo ciclismo asoma y Gran Bretaña lo está liderando. al menos de momento.

El futuro está asegurado

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De igual manera que Yates se ha convertido en una alternativa para el futuro, Enric Mas y 'Superman' López también entran en esta lista. El mallorquín ha hecho una Vuelta espectacular y se va con una etapa, el segundo puesto de la general y el premio al mejor joven. Es la cara del futuro del ciclismo español. 

Por su parte, el colombiano aparece por encima de otros compatriotas como Urán o Quintana, a los que se le han atragantado las Grandes en los últimos años. Tanto el colombiano como Yates y Mas serán la alternativa al dominio del Sky en el futuro, y veremos como responden sus piernas en una carrera del nivel del Tour de Francia.

Valverde, la luz de un Movistar que sigue espeso

El otro español protagonista ha sido sin duda Alejandro Valverde. El murciano ha vuelto a destacar, ha ganado dos etapas y se ha hecho con el maillot de la regularidad por cuarta vez en su carrera. Con 38 años el corredor español parece un 'jovenzuelo' y ha hecho soñar a la afición con la victoria en la general durante toda la ronda, aunque al final el Tour hizo mella en sus piernas y se tuvo que conformar con la quinta plaza en la general.

El buen hacer de Valverde contrasta con el Movistar, que sigue sin dar con la tecla. El conjunto telefónico no consigue un pódium desde que en 2017 llegara al segundo puesto del Giro con Quintana. La clasificación por equipos parece un premio menos para una estructura como la del equipo telefónico, y tendrán que ver como plantean el futuro en las Grandes Vueltas y como consiguen volver a pelear por las grandes con Landa y Quintana.

El colombiano por su parte sigue con su mala racha. Un décimo puesto en Francia y un octavo en la Vuelta saben a poco para un corredor que ha tenido el Tour en sus piernas. Tiene 28 años y está llegando a la madurez, pero tendrá que dar un paso adelante si quiere confirmas un talento que ya ha demostrado que tiene. el próximo año será clave tanto para él como para el conjunto de Eusebio Unzúe.

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¿Y el Mundial?

La última gran cita del calendario ciclista será el Mundial de Innsbruck, en Austria. Un campeonato durísimo que cuenta con el propio Vaverde como uno de los máximos favoritos. Veremos como llega el murciano a una cita donde es el máximo favorito pero sin conseguir aún el oro. Sagan o Nibali serán otros de los candidatos a una de las pruebas más interesantes del calendario internacional.

Más allá del Campeonato del Mundo, la Vuelta ha vuelto a demostrar que o es una carrera más. La ronda española vuelve a confirmarse, y un año más hemos visto una edición que ha tenido emoción hasta el final. El futuro del ciclismo está asegurado y el de la Vuelta a España, también.