Catástrofe del Barça en Butarque
Dos minutos fatídicos de la defensa del Barça permitieron al Leganés remontar el 0-1 inicial y acabar imponiéndose a un líder sin intensidad
Coutinho hizo el primero y El Zhar y Óscar Rodríguez los de los pepineros
El FC Barcelona no pudo con el Leganés y confirma lo que se llevaba hablando desde hace algunas jornadas, se gana, pero el juego preocupa. Hoy los culés cayeron y activaron las bocinas y alarmas en el seno del vestuario blaugrana, dos jornadas para reafirmar el liderato y solamente un punto conseguido y la posibilidad de que el Real Madrid acabe primero la jornada.
El Leganés no venía con una buena dinámica. Colista, afrontaba este partido de miércoles con tan solo un punto en su casillero, habiendo caído en sus últimos tres choques. A pesar de estar en casa con su afición, el Barça llegaba como claro favorito, ya que no había perdido ninguno de sus cuatro enfrentamientos con los pepineros, pero los registros están para romperlos.
Un partido que comenzó con Messi como protagonista. No solo por ser el capitán blaugrana y todo lo que representa el ‘10’, sino que el argentino está ante su partido número 700 con la elástica del Barça y entre ceja y ceja al Leganés, al que le ha marcado siete goles, más que cualquier otro jugador de Primera División.
El encuentro en Butarque comenzó relativamente tranquilo, el Barça comenzó con largas posesiones y aunque sin acercamientos muy claros, Dembélé ya avisó enviando un balón al lateral de la red. Corría el minuto 12 y los engranajes de la delantera culé rodaron para hacer un golazo. Coutinho recibió un balón de Messi en la frontal, que controló, no demasiado bien, pero que incluso así lo aprovechó para lanzar una volea con el exterior que se iba abriendo hacia el palo, imposible para Cuellar. Segundo gol del brasileño esta temporada, marca de la casa y la segunda asistencia del argentino en lo que llevamos de campeonato, conexión temible la que hacen los dos jugadores.
El Barça celebra el gol de Coutinho en Butarque / SERGIO PEREZ
El Barça no se conformó con esto y ante un Leganés noqueado apretó un poco el acelerador y apunto estuvo Messi de hacer el segundo cuatro minutos después. Jugada clásica de la estrella azulgrana, control y coloca la pelota para darle en la cruceta y dejar a todo el estadio mudo.
Todo parecía estar controlado, peor hacia la media hora de partido, el Barça puso el modo en ‘off’ y el partido se descontroló igual que pasó el domingo en el Camp Nou contra el Girona. Los carrileros pepineros empezaron a darle profundidad al equipo que se vio con posibilidades de nuevo y empezaron a probar a Ter Stegen con un disparo de En-Nesyri y otro antes del descanso de Óscar Rodríguez, en el que el alemán se adornó con una palomita para mantener la ventaja de su equipo al descanso. Empezaba a chispear para los de Valverde presagiando lo que estaba por venir.
Comenzó la segunda parte y en apenas dos minutos, el Barça pasó de tener un partido más o menos controlado, por lo menos el marcador, a ir por detrás. El Leganés aprovechó hacia el minuto 52 una desconexión de la zaga blaugrana para remontar y marcar dos goles poniendo a Butarque patas arriba.
El primero en golpear fue El Zhar, en una jugada por la banda izquierda que acabó rematando el jugador marroquí a un metro del guardameta. Casi mientras se celebraba el gol, el Leganés ya se plantó de nuevo en el área de Ter Stegen para hacer el segundo. Otro jugada donde los pepineros pillaron al Barça en un dos contra Piqué. El defensa trató de despejar, pero lo hizo mal, entregándosela en bandeja a Óscar Rodríguez que batió al portero alemán mientras caía. El exmadridista hacía realidad los sueños de todo aficionado con la camiseta de franjas blancas y azules.
El centrocampista marroquí del Leganés Nabil El Zhar (d) celebra el primer gol de su equipo ante el FC Barcelona, durante el partido de la sexta jornada de Liga que disputan hoy en el estadio de Butarque. / JuanJo Martín
Valverde trató de reaccionar e hizo rápidamente un cambio en la delantera. El hoy titular, Munir El Haddadi salió para dar entrada a Luis Suárez. El Barcelona con toda la artillería arriba ya estaba sobre el campo dispuesto a enmendar el ‘minuto fatídico’; sin embargo, ni mucho menos comenzó a dominar y asediar el área de Cuellar, más bien todo lo contrario, un Leganés crecido estaba más cerca de asestar el tercer tanto que de unas tablas en el marcador.
El ‘Txingurri’ buscó más soluciones, y rápidamente dio paso a Malcom, que disputaba sus primeros minutos en LaLiga, por Dembélé, que hizo un partido discreto desde que el Barça perdió el control en la primera parte. Por otro lado, quiso imprimirle más velocidad y verticalidad al juego por las bandas y Jordi Alba sustituía al hoy lateral zurdo, Thomas Vermaelen.
A falta de 10 minutos para el final, un doble “uy” sonó en Butarque. Coutinho se hizo hueco en el área y trató de volver a hacer uno de sus golazos, colocado al palo largo, pero esta vez no le salió tan bien el disparo y Cuellar pudo repeler el balón. El rechace le cayó a Rakitic y a bocajarro, en un remate acrobático en el aire, intentó hacer el segundo, pero el ‘Pichu’ se rehízo y volvió a salvar a su equipo para mantener al Lega a flote.
El Barça no pudo reaccionar y lo peor de todo es que no volvió a crear peligro, a pesar de manejar el balón. Las últimas ocasiones las tuvieron los locales que todo el rato pillaban a la contra a una zaga que hoy no tuvo su día.
Así terminó el partido, con el Leganés saliendo de ese vigésimo puesto de colista y asestando al Barça un golpe para confirmar una crisis en el juego del equipo de Valverde. Las alertas se encienden y los culés tendrán el sábado un difícil partido contra el Athletic para mostrar a su afición que esto solo han sido dos resbalones o que hay una crisis a tener en cuenta.
Por su parte, los de Pellegrino tendrán hasta el domingo de descanso antes de medirse a un Betis que viene hacia arriba, en un partido que puede confirmar las buenas sensaciones para cualquiera de los dos conjuntos.
- EN 30 SEGUNDOS
