La mayor eléctrica de Portugal pide ayuda internacional tras el paso del huracán Leslie
100.000 permanecen sin luz en el país vecino
Lisboa
Por primera vez en su historia, Energías de Portugal (EDP), la empresa a cargo de la distribución eléctrica en el país vecino, ha declarado el estado de emergencia ante la gravedad de los daños provocados a la red lusa por el huracán Leslie, que dejó a más de 300.000 personas sin luz en su paso por Portugal este fin de semana. Este lunes más de 100.000 personas siguen sin electricidad, y EDP Distribución reconoce que el nivel de destrucción en las zonas afectadas es tal que difícilmente podrá reestablecer el suministro de energía a ciertas partes del país sin ayuda extranjera.
Los técnicos de la mayor eléctrica de Portugal señalan que el distrito de Coimbra ha sido el más afectado por la tormenta, que dejó a una víctima mortal y 28 heridos cuando cruzó el centro de Portugal durante la madrugada del domingo. Las ráfagas de viento –que alcanzaron los 176 kilómetros por hora en Figueira da Foz– rompieron cables eléctricos, tumbaron torres de transmisión y destruyeron otros elementos claves de la infraestructura nacional.
Dada la gravedad de los estragos, la empresa energética ha declarado el estado de emergencia para "concretar la movilización nacional de todos los medios humanos y materiales de la empresa y sus suministradores a nivel nacional". A través de la Autoridad Nacional de Protección Civil (ANPC), efectivos del Ejército portugués también han sido movilizados para asistir en las operaciones y han sido desplazados a la zona con generadores y equipos de telecomunicaciones.
Aunque unas 200.000 personas recuperaron el suministro eléctrico en las 24 horas siguientes al paso del huracán, en un comunicado EDP afirma que quienes siguen sin luz se encuentran en las zonas del centro del país más castigadas por el huracán en "el distrito de Coimbra, y en particular en las localidades abastecidas por las subestaciones de Louriçal y Soure, donde varios cables de alta y media tensión permanecen inoperables y con sus torres dañadas".
Además de la ayuda nacional, EDP Distribución admite la posibilidad de contar con ayuda externa, comenzando por empresas congéneres en España que puedan atravesar la frontera para participar en las reparaciones en el interior luso. La eléctrica reconoce que se trata de la situación más grave y complexa con la que se enfrenta en más de 40 años de historia, y por eso admite que de momento es "imposible estimar la fecha de conclusión de los trabajos".
Hay que remontarse a 1842 para encontrar registro de una tormenta de la potencia del huracán Leslie impactando sobre el territorio portugués. Aunque las alertas de las autoridades lusas y las precauciones tomadas por la población civil evitaron grandes pérdidas humanas, el impacto material del huracán en ciertas partes de Portugal ha sido nada menos que devastador.