Verstappen a empujones con Ocon en el pesaje tras chocar en carrera
El piloto holandés recriminó al galo la maniobra que le hizo perder la carrera
Verstappen a empujones con Ocon en el pesaje tras el Gran Premio de Brasil(Twitter)
El francés Esteban Ocon (Force India) dijo este domingo que el holandés Max Verstappen (Red Bull) tuvo un comportamiento "muy violento y muy poco profesional" después de que le empujara varias veces en el garaje por causa de un incidente entre ambos durante el Gran Premio de Brasil.
"Ha sido muy violento y muy poco profesional. Después de la carrera uno tiene que hablar, no puede venir con las manos por delante", afirmó Ocon a las televisiones en el paddock del circuito de Interlagos, en Sao Paulo.
El piloto francés buscaba desdoblarse de Verstappen, quien en ese momento lideraba la prueba por delante del británico Lewis Hamilton (Mercedes), pero en ese intento contactó con el monoplaza del holandés. El impacto provocó que Verstappen diera un trompo y perdiese la posición frente a Hamilton, quien pasó a liderar la prueba hasta su conclusión. "Conozco a Max, no hay forma de hablar con él", añadió Ocon.
Una vez finalizada la carrera, Verstappen se encaró con el de Force India y le empujó varias veces en el garaje durante el pesaje de los pilotos, de acuerdo con unas imágenes divulgadas por la televisión francesa. "Él me empujó y quería darme un puñetazo. Eso no es profesional", manifestó.
Verstappen empuja a Ocon en el pesaje
La Federación Internacional del Automóvil (FIA) ha pedido explicaciones a los dos pilotos para aclarar lo sucedido y aplicar eventuales sanciones para esta o para la última carrera de la temporada, en Abu Dabi.
El piloto holandés se marchó del podio visiblemente enfadado y sin celebrar su segundo puesto. Antes de la ceremonia, tildó a Ocon de "idiota" y dijo que merecía la victoria.
"No hablo con idiotas", expresó Verstappen en la zona mixta del trazado paulista, penúltima prueba del campeonato de Fórmula Uno que venció el cinco veces campeón de la categoría Hamilton, dando a Mercedes su quinto mundial de constructores.
