El 46% de los trabajadores españoles hace más de 4 horas extras a la semana
Según el mismo estudio desarrollado por IWG, el 77% de las empresas afirman que gracias al trabajo flexible son más productivas y consiguen atraer más talento, sin embargo, a partir del 12 de mayo la nueva normativa obliga a las empresas españolas a registrar el horario laboral de todos sus empleados
Madrid
Este próximo domingo entra en vigor el Decreto Ley de protección social que busca poner fin a la precariedad laboral y que incluye la obligación por parte de las empresas de que sus empleados realicen el registro de las horas de su jornada laboral. Esta iniciativa legislativa busca terminar con algunos de los datos reflejados en la Encuesta de Población Activa (EPA) del cuarto trimestre de 2018, donde se muestra que 797.000 trabajadores españoles realizan horas extra en sus trabajos y el 48% de ellos declaran no cobrarlas. Según el último estudio elaborado por IWG, principal proveedor de espacios de trabajo flexible, en España casi la mitad de los profesionales liberales (46%) hace más de 4 horas extra semanales.
El nuevo escenario laboral se aleja del modelo tradicional de jornada de 8 horas ininterrumpidas en una misma oficina. Los datos obtenidos en esta encuesta realizada a más de 15.000 personas de 80 nacionalidades diferentes reflejan que las nuevas formas de trabajo ofrecen a las personas la libertad de decidir dónde, cuándo y cómo trabajar. De hecho, el 83% de los encuestados afirma que, entre dos trabajos con características similares, rechazarían aquel que no ofertara trabajo flexible.
Según este estudio, el trabajo flexible ha ayudado al 77% de las empresas a ser más productivas y exitosas. Por eso, el 62% de las compañías a nivel mundial ya tienen políticas de flexibilidad, lo que se traduce en que cerca de la mitad de los empleados ya pasan dos días y medio a la semana de media fuera de sus oficinas centrales.
España a la cabeza de países con mayor resistencia al cambio
En lo referente a la mejora en la calidad de vida de las personas, la flexibilidad aumenta la satisfacción de los trabajadores al ayudarles a conciliar su vida personal y laboral. Desde la reducción de los tiempos de desplazamiento al trabajo y el estrés que estos generan, a una mejor organización de las cargas familiares, la flexibilización de las horas de trabajo se postula como el pilar de la conciliación.
Sin embargo, el estudio también recoge la dificultad de cambiar una cultura laboral mucho más rígida que ha sido la norma habitual durante mucho tiempo. Y precisamente es España quien lidera la tabla de países con mayor resistencia al cambio, con más de dos tercios de responsables de negocio que han expresado sus dudas a la hora de transicionar hacia un modelo de trabajo flexible.