La sanidad pública británica busca más de 40.000 enfermeras
Preocupan los planes de inmigración 'postbrexit' del gobierno para limitar la entrada de profesionales en el país
Londres
El servicio de salud pública británica, conocido por sus siglas de NHS en Reino Unido, ha emprendido la búsqueda de enfermeras y enfermeros en el extranjero para cubrir la demanda de 40.000 que tienen en estos momentos ya que no disponen de suficientes enfermeras británicas. El sector con una necesidad mayor es el del cuidado de las personas mayores.
El plan es el de reclutar 5.000 enfermeras por año de aquí al 2024, y complementarlo con personal local, hasta alcanzar la cifra de 40.000. Los principales países donde van a centrar la búsqueda son Filipinas, India, Irlanda y Australia. Sin embargo, las expectativas no son muy altas, según un informe interno filtrado al diario The Times.
No esperan reducir en más de 200 enfermeras la carencia en estos 5 años porque se están marchando muchas, pero consideran que, de no poner en marcha el plan, la brecha se puede ampliar hasta las 68.500 vacantes. En total, el NHS emplea a 1,3 millones de profesionales, pero hay cerca de 100.000 vacantes de personal cualificado sin cubrir.
Existe una enorme preocupación por el nuevo plan de inmigración del gobierno después del brexit para eliminar los privilegios de los profesionales europeos y no permitir la entrada de ningún profesional al país que no tenga un contrato previo de 35.000 euros. No creen que sean unas medidas realistas, teniendo en cuenta que muchas cuidadoras de personas mayores cobran sueldos menores.
El referéndum del brexit ha provocado que muchas enfermeras comunitarias decidieran marcharse o se lo estén planteando, en especial las españolas, que son las que gozan de mayor reputación aquí y son las más buscadas por su excelente formación. Con el 17% de las enfermeras comunitarias, España es el país que aporta más enfermeras a hospitales británicos, por detrás de Irlanda.
El centro de estudios Health Foundation ha expresado sus reticencias con el plan del NHS y, en concreto, con la voluntad de contratar enfermeras de países pobres "por el impacto que pueden tener en la calidad de la atención a los pacientes".