ARM se une al bloqueo a Huawei: estas son las consecuencias

Madrid

La firma británica ARM, encargada del desarrollo de la arquitectura de la mayoría de procesadores para móviles, ha anunciado que se suma a empresas como Google, Qualcomm, Intel, Xilinx Inc y Broadcom en el veto a la china Huawei, tal y como ha reconocido un portavoz de la compañía en declaraciones al medio especializado The Verge.

Una decisión que llega apenas unos días después de que el Departamento de Comercio de Estados Unidos incluyera al gigante tecnológico en la lista negra de empresas que suponen una "amenaza para la seguridad nacional", lo que implica la imposición inmediata de restricciones que complicarán mucho que el gigante tecnológico pueda hacer negocios con compañías estadounidenses.

ARM se suma al veto

A partir de entonces, empresas como Google, Qualcomm o Intel han seguido sus pasos y han vetado a la firma china. De esta manera, Huawei no podrá utilizar el sistema operativo Android a partir del 19 de agosto ni la tienda de aplicaciones de la compañía. Tampoco los procesadores de Qualcomm o Intel, empujando a la firma china a desarrollar su propio sistema.

La empresa trabaja en su propio sistema operativo desde hace meses y ya cuenta con un procesador propio para hacer frente al veto de las distintas compañías estadounidenses. Sin embargo, el movimiento de ARM supone un duro golpe contra Huawei, quien se apoyaba en su chipset para el desarrollo de los procesadores Kirin.

Las consecuencias

A día de hoy, la mayoría de procesadores móviles utilizan arquitectura ARM. Desde Apple o Qualcomm hasta Samsung o la propia Huawei con sus Kirin. Por esa misma razón, el hecho de que ARM haya solicitado a sus empleados (y los de todas sus subsidiarias) que suspendan todas las actividades con Huawei provoca que la firma china tenga que buscar una nueva vía para poder sacar adelante su tecnología.

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Mientras tanto, desde Huawei confían en que esta situación pueda resolverse: "Valoramos nuestras relaciones cercanas con nuestros socios, pero reconocemos la presión que sufren algunos de ellos como resultado de decisiones motivadas políticamente. Confiamos en que esta lamentable situación pueda resolverse y nuestra prioridad sigue siendo continuar brindando productos de clase mundial a nuestros clientes en todo el mundo".

De esta manera, el Kirin 985 será el último procesador de Huawei con chipset de ARM. A partir de entonces, la firma china tendrá que rehacer su procesador por completo y buscar una alternativa a la altura. Sin embargo, el hecho de que Intel y ARM hayan boicoteado a Huawei complica las opciones para una empresa que en cuestión de una semana se ha visto rodeada por la decisión del gobierno de Donald Trump.