España se integra en el proyecto industrial de la nueva generación de Defensa aérea
La ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, ha firmado este lunes en el Salón Aeronáutico de Le Bourget el acuerdo marco que formaliza la entrada de España en el programa del sistema de armas de siguiente generación, en el seno del futuro sistema de combate aéreo europeo (FCAS)
El presidente galo, Emmanuel Macron (3-izq); las ministras de Defensa española, Margarita Robles (3-dcha); gala, Florence Parly (2-izq); y alemana, Ursula von der Leyen (izq), asisten a la ceremonia de firma por parte del presidente y consejero delegado de Dassault Aviation, / BENOIT TESSIER / POOL (EFE)
París
Es el proyecto militar más ambicioso de la historia europea, el futuro sistema aéreo de combate que supone una inversión de 50.000 millones en 20 años, según estimaciones.
Se trata de construir el caza de sexta generación que estará rodeado de una nube en el que se integren todos los sistemas de combate aéreo, terrestre y naval y que deberá sustituir al Eurofighter y Rafale , los dos cazas comercializados en la actualidad. El proyecto está liderado por el grupo francés Dasseau y el europeo Airbus.
Con esta firma, en presencia del presidente francés, Emmanuel Macron, junto a las titulares de Francia y Alemania, Florence Parly y Úrsula von der Leyen, se concreta la entrada de España en el programa que renovará las actuales flotas de aviones de combate europeos, de aquí a 2040. La ministra Margarita Robles no ha querido concretar qué porcentaje tendrá España en este proyecto pero ha señalado que “es un compromiso serio de futuro”.
“Nuestra intención es cooperar con el 33 % de los proyectos tecnológicos“, lo que no significa obligatoriamente que España tendrá un tercio del programa total.
Para el proyecto de viabilidad Francia y Alemania ya han aportado a medias 65 millones de euros. "Esta firma estructura la relaciones entre los tres países de manera irreversible", según fuentes del ministerio defensa francés.
Por ahora, sin embargo, hay otro proyecto europeo alternativo que es el Tempest de BAE Systems (británico) y Leonardo (italiano).
En la industria de Defensa española aplaude la participación de España pues se calcula que por cada euro invertido en programas industriales de Defensa retornan cinco euros a la economía nacional. Eso además de lo que significa para la independencia estratégica del país.
