Así enamoró Guardiola a Rodrigo

Madrid

Rodrigo Hernández y Pep Guardiola forman una pareja que estaba destinada a unirse en algún punto de sus carreras. El hasta ahora jugador del Atlético de Madrid paga este miércoles su cláusula de rescisión para desvincularse del equipo rojiblanco y hacer realidad uno de sus sueños: ponerse a las órdenes del técnico de Santpedor.

En más de una ocasión el centrocampista ha confesado cómo se sintió identificado con el fútbol de Guardiola cuando solo tenía diez años. Mientras todos los niños se fijaban en los goles, él veía otras cosas: “Desde muy pequeño empecé a interesarme por este deporte, sobre todo por cómo funcionaba […] Me interesaba más entender el juego que disfrutarlo. Coincidió con el boom del fútbol táctico, de Guardiola, de la selección española… Me empecé a enganchar a ese fútbol”, reconocía en febrero a El País.

En la conversación, Rodrigo reconoce que el Barça de Guardiola le enganchó porque era, sobre todo, un equipo “ganador”. Pero no solo por eso, también reconoce que era “algo innovador” que “destacó mucho” en el orden internacional.

El enamoramiento es mutuo y ha quedado demostrado en las últimas semanas. Manu Carreño ya informó en junio en El Larguero que el jugador había manifestado al Atlético su intención de marcharse después de que Guardiola hiciera fuerza durante meses para convencerle de que iba a ser una pieza clave en su City tanto en el presente como en el futuro.

El crecimiento del jugador en las últimas temporadas ha sido tal que no solo el City ha pretendido hacerse con sus servicios. También ha estado bajo el punto de mira del Barcelona y del Bayern, según informó Antón Meana en la SER.

Rodrigo, criado en la cantera del Atlético, regresó al club el pasado verano para convertirse en una pieza clave en el centro del campo del equipo de Simeone tras la marcha del capitán Gabi Fernández. El centrocampista ha sido una de las piezas claves del conjunto rojiblanco. De hecho, ha sido titular en 32 partidos de Liga y seis encuentros de la Liga de Campeones.