El primer plato fuerte del Tour de Francia

Primera de las citas importantes de este Tour de Francia y tan sólo en la sexta jornada de competición, donde los ciclistas tendrán que afrontar la etapa más exigente hasta la fecha con 160,5 kilómetros que irán desde Mulhouse hasta La Planche Des Belles Filles, lugar donde los principales favoritos de cada año suelen destacar.

Este año, sin embargo, la organización ha ido un paso más allá incrementando la dureza de la llegada con un kilómetro adicional al de otros años y dos muros adicionales. A ello habría que sumar los siete puertos que tendrán que lidiar y que, probablemente, nos dejen las primeras diferencias entre favoritos y algún que otro movimiento en la clasificación general, con un Julian Alaphilippe que defenderá su ‘maillot’ amarillo seguramente desde el pelotón permaneciendo alerta de posibles ataques.

Como decimos, tres puertos de primera categoría, dos de segunda y otros dos de tercera cuyas rampas oscilan entre el 5% y el 9,5% pero cuya sucesión harán muy exigente esta sexta etapa. Muy complicado el final de la misma con ese final en alto muy cansado después de los seis puertos anteriores.

Jornada clave para probarse, y de qué manera, en este Tour de Francia la que tendrán los favoritos a bañarse en oro por las calles de París en la última etapa. Día propicio para ver los primeros movimientos en la montaña de los Bernal, Thomas, Quintana y compañía sin descartar a otros corredores que no cuentan -a priori- con el cartel de favorito pero que, como Enric Mas, no tienen nada que perder y pueden aparecer desde la segunda línea con un Quick Step en buena sintonía con esta edición.