EEUU acusa a China de llevar a cabo una "economía depredadora"
El secretario de Defensa estadounidense, Mark Esper, desestabiliza la región de Asia-Pacífico durante una visita oficial a Japón
El jefe del Pentágono, Mark Esper, ha sido muy contundente durante el inicio de su reunión en Tokio con el primer ministro nipón, Shinzo Abe, con quien trató la escalada de las tensiones entre Pekín y Washington, la alianza bilateral EEUU-Japón o los últimos ensayos armamentísticos de Pionyang. "China continúa desestabilizando la región. Sus agresiones militares y su estrategia calculada de economía depredadora viola el orden internacional basado en la ley que nosotros intentamos mantener", según unas declaraciones de Esper recogidas por la agencia nipona Kyodo.
El secretario de Defensa volvió a cargar contra China después de que Estados Unidos decidiera a comienzos de semana designar al gigante asiático como "manipulador de divisas", lo que extiende al campo monetario el conflicto comercial que mantienen las dos primeras potencias mundiales y parece alejar la posibilidad de un acuerdo.
Esper también expresó su "preocupación" por los últimos lanzamientos de misiles de Corea del Norte, y afirmó que Washington "continúa comprometido con la desnuclearización completa, irreversible y verificable" del régimen. La visita del jefe del Pentágono a Japón y a Corea del Sur, adonde viajará este viernes, se produce después de que Pionyang realizara cuatro lanzamientos de proyectiles en menos de dos semanas, unos ensayos que el dictador norcoreano, Kim Jong-un, calificó de "advertencia" a los países aliados.
Esper asimismo tiene previsto reunirse este miércoles con su homólogo japonés, Takeshi Iwaya, para tratar la alianza bilateral de seguridad y la que mantienen también ambos países con Corea del Sur, en un momento en que las relaciones entre Seúl y Tokio se han deteriorado a su peor nivel de las últimas décadas a raíz de una disputa histórica.
Se espera que los titulares de Defensa de Washington y Tokio examinen la posibilidad de que Japón se una a la iniciativa estadounidense para conformar una alianza naval destinada a escoltar los petroleros en el golfo Pérsico, en el actual contexto de tensiones con Irán.