El 'confidente y arreglador' de presidentes en Argentina

Madrid

Desde 48 horas antes del comienzo de los comicios y hasta su finalización, en Argentina no se podrán realizar más actos de campaña ni se podrán publicar encuestas sobre las intenciones de voto. El sufragio es obligatorio para los argentinos nativos, y optativo para los menores de entre 16 y 18 años, los mayores de 70. También pueden votar los procesados en causas penales que estén en prisión preventiva, y los argentinos residentes en el exterior que se hayan inscrito antes del 30 de abril de 2019. En total más de 33 millones de personas están llamadas a participar en estas elecciones.

Alberto Fernandez es el “arreglador y confidente” de varios presidentes argentinos, y ahora esta a punto de convertirse, si se cumplen las encuestas de intención de voto, en el presidente de la tercera economía de Latinoamérica.

Alberto Fernandez, peronista moderado, fan de Bob Dylan hasta el punto de ponerle a su perro el nombre del artista, y que tendrá que sacar la varita mágica para sacar adelante a un país afectado por los miedos, la inflación y un crecimiento nimio.

Las encuestas le dan 20 puntos de diferencia, por encima de sus adversarios, el tándem compuesto por el actual presidente Mauricio Macri, quien tuvo que pedir ayuda al FMI después de que se desplomara el peso argentino y para salvarse de la bancarrota.

Sus planteamientos económicos, llevaron a los empresarios de Argentina a mostrar su preocupación con caídas importantes en la bolsa de valores y en la moneda nacional. Pero tras moderar parcialmente su discurso económico, este profesor de la Universidad de Buenos Aires donde ha estado dando clases, tiene claro cual es el camino a seguir.

Fernandez, creado en una familia de abogados, ha trabajado dentro del peronismo durante años. Ha sido jefe de gabinete de Nestor Kirchner y de Cristina Fernandez, ambos presidente de Argentina. Precisamente a esta última, la lleva como tándem en las papeletas para que sea su vicepresidenta. Su relación es compleja, y no se ha quedado callado cuando ha tenido que criticarla cuando era presidenta, en sus políticas populistas de control de la moneda, limitar los impuestos a las importaciones y exportaciones de productos agropecuarios.

Alberto Fernandez, confiado en su victoria, ya ha adelantado medidas y nombres para su gabinete. Macri, el actual presidente, dice que esperará al domingo, porque nada esta dicho aún.