Ojete Calor revienta la jornada de reflexión
El dúo formado por Carlos Areces y Aníbal Gómez desató la diversión y la ironía en el último de los dos conciertos celebrados en Madrid en vísperas de las elecciones generales
Madrid
Nada viene mejor a la España que tenemos que el subnopop, término que acuñó Ojete Calor, el dúo formado por el actor Carlos Areces y por Aníbal Gómez. Un estilo de música que consiste en cantar letras graciosas, no siempre afinadas, sobre una base electrónica. De todos los grupos que se han acercado a esta tendencia, ha sido Ojete Calor el que más lejos ha llegado, en todos los sentidos. Primero porque sus letras, más allá de la gracieta, se convierten en un costumbrismo que da miedo, no por culpa de ellos, sino de un país que lucha por convertirse en su propia parodia. Y segundo, porque han llenado dos días seguidos la sala La Riviera, en Madrid, un recinto con capacidad para 2000 personas.
El de ayer era un concierto ad hoc para la jornada de reflexión tan excéntrica como la de este domingo 10 de noviembre. Vestidos con pieles, vestidos de satén rosa sacados de los baúles de las bisabuelas, abalorios y un bigote fascista, salían al escenario, que tuvo hasta su momento columpio, igual que si se tratara de Mariah Carey. Las letras irónicas del grupo eran respondidas por un público entregado, dispuesto a reír, incluso cuando se mencionaba a Vox. "Queremos ir a misa", coreaba parte del público, riéndose de ese grupo de fascistas atrincherados en las puertas del Valle de los Caídos, los días previos de la exhumación del dictador Franco.
Ellos respondían con sus letras. Por ejemplo, con las de La gente mala, "Adolf Hitler y Bin Laden, se pasaban mogollón", o "La gente mala, que lleva piercing, la gente mala que lleva tatoos". También repartieron al cuñadismo, ese que hoy también ejercerá su derecho al voto, gracias a una de las canciones más bailadas, Opino de que, dedicada a todos los tertulianos del mundo y bailada junto a Arturo Valls. Para aquellos aficionados a las frases hechas o los tópicos tuvieron un espejo con Cero sesenta, canción que desmonta todos los dichos populares, como "La gente más humilde es la más generosa".
Ojete calor no deja títere con cabeza. Lo demostró su repaso a otros hitos del subnopop, como Ana Belén y su Agapimú, canción que versionaron mejorando la original y recalcando la expresividad de versos como "me siento nueva como la nieve cuando nieva". También a Sergio Dalma y su Bailar pegados, canción para la que contaron con uno de los primeros cameos, el de la humorista Ana Morgarde. Y más versiones, Come as you are, de Nirvana, porque Ojete Calor se atreve hasta con Kurt Cobain.
Los cameos fueron la comidilla de todo el concierto. Resines bailando como no hubiera mañana, Hugo Silva cantando la banda sonora de Willy Fog, Sílvame y Loles León caracterizada como Linda Hamilton para cantar uno de los primeros éxitos del grupo Cuidado con el cybor (corre Sarah Connor), una parodia del personaje de Terminator. Pero no solo se salía al escenario a cantar, también a surfear por encima del público a bordo de una lancha hinchable, de la que se cayó Joaquín Reyes.
Todo esto intercalado con temas como Que bien tan mal, parodiando a todas las personas tóxicas, Vintage, riéndose de los modernos que compran ropa con sudor en Malasaña, ropa que abundaba por toda la sala. Porque si algo tiene Ojete Calor es que funciona como espejo, igual que Los asquerosos de Santi Lorenzo pero con base electrónica. Todos podemos estar en sus canciones, aunque pensemos que estamos por encima de Maribel, de Raquel Bollo o de las Mocatrices.
También hubo momento para las mini canciones como Bebida refrescante o Teleinformación, que duran apenas una estrofa. El público lo dio todo con Sinceridad no debida, Tonta Gilipó y con Gente que imita mal los acentos. Y volvemos a la jornada de reflexión, porque después de la cabecera en la Cadena SER de Daniel de la Fuente, nadie volverá a escuchar igual Vete a tu casa y, más, después de las elecciones.
Pepa Blanes
Es jefa de Cultura de la Cadena SER. Licenciada en Periodismo por la UCM y Máster en Análisis Sociocultural...