Tras el encontronazo entre PP y PSOE por la composición de la mesa del Congreso de los diputados, que impidió que se materializara el cordón sanitario a Vox propuesto por socialistas y Unidas Podemos, los dos grandes partidos nacionales han encontrado una solución para el reparto de las presidencias que puede excluir a Ciudadanos y también al partido de Santiago Abascal. Según confirman fuentes parlamentarias a la SER, el partido de Pablo Casado presidirá entre 6 y 7 comisiones, entre legislativas y mixtas. Todas ellas «relavantes», según el Partido Popular. En el Senado, el Partido Socialista solo concede la presidencia de la comisión de Presupuestos al Partido Popular, que se queja de ser excluido en la Cámara Alta, olvidando que cuando era el grupo mayoritario también restringía al mínimo las presidencias que ofrecía al principal partido de la oposición. El socio del gobierno, Unidas Podemos también mejora su presencia en las comisiones con respecto a la legislatura anterior. Los de Iglesias presidirán un total de seis comisiones, entre mixtas y legislativas que son dos más que hace unos meses, cuando estaban al frente de la de Presupuestos. Fuentes conocedoras de la negociación aseguran a la SER que el PNV y ERC, que ha facilitado la investidura de Sánchez y de cuyo apoyo depende la aprobación de los presupuestos y la continuidad de la legislatura, presidirán al menos una comisión. El reparto definitivo comenzará a sustanciarse durante los próximos días. El próximo viernes quedarán constituidas las legislativas y la siguiente semana será el turno de las mixtas y las no legislativas. Casi con toda probabilidad, Vox y Ciudadanos no estarán al frente de comisión parlamentaria alguna a pesar de que los de Abascal son tercera fuerza política y de que el partido de Arrimadas presidió varias en la anterior legislatura, entre ellas la encargada de investigar casos de corrupción política. Vox asegura que está siendo injustamente excluidos de todos los órganos de control del Congreso y denuncia la supuesta connivencia para aislarlos entre PP, PSOE y Ciudadanos, o lo que ellos califican como “trirojito”. Ahora son tercera fuerza política en el Parlamento y cree Vox que, atendiendo a la proporcionalidad, deberían obtener al menos el mismo número de presidencias que tenía Ciudadanos en la anterior Legislatura. Sin embargo, en un intento de desmontar esta idea por parte de los populares, se asegura es el primer grupo de la cámara el que decide el reparto y que, además, es Vox quien se autoexcluye al exigir tan sólo presidencias. Las comisiones, que desempeñan una labor esencial en el análisis, elaboración y discusión de la legislación que luego aprueba el Congreso, tiene también la función de control del poder Ejecutivo. Según el reglamento de la Cámara, pueden recabar información y documentación que consideren necesaria así como exigir la comparecencia de miembros del Gobierno, autoridades y funcionarios públicos. Por ejemplo, ante la de Justicia deberá acudir la exministra Dolores Delgado propuesta para la Fiscalía General del Estado. Los socialistas no han cedido la presidencia ni de es esta comisión ni de la de Interior, que bien podría tener como presidenta a Ana Botella, ex número dos del departamento que dirige Fernando Grande Marlaska. Tampoco controlará la oposición la comisión permanente dedicada a la investigación de casos de corrupción, a la que los populares han solicitado que acuda a declarar Pablo Iglesias, vicepresidente del Gobierno.