La última obra de Banksy para San Valentín sufre una pintada vandálica
Una niña que disparaba corazones sobre la pared de una casa de Bristol ha quedado tapada por un graffiti
Madrid
La última obra de Banksy con motivo del día de San Valentín amaneció el pasado sábado cubierta parcialmente con una pintada.
El conjunto artístico ocupa la pared lateral de una fachada de Bristol, ciudad natal del artista, que acostumbra a dejar sus "marcas artísticas" sin más huellas que su estilo reconocible. Sin embargo, esta vez Banksy se atribuyó públicamente la autoría del mural a través de su cuenta de redes sociales, en las que publicó varias imágenes para cerrar el debate.
Una niña que dispara corazones
En su conjunto, la obra, descubierta la noche del jueves, presenta una explosión de rosas rojas y hojas disparadas hacia arriba por un niña con una especie de 'tirachinas'. La obra de arte está en la pared lateral de una casa alquilada propiedad de Edwin Simons, de 67 años, cuya hija expresó en The Guardian su emoción por lo ocurrido.
"Hay muchas personas que vienen y lo disfrutan, toman fotografías, es fantástico", dijo Kelly Woodruff, de 37 años, al periódico. Según afirmó, los lugareños lo llamaron "el Valentine's Banksy".
"BCC gilipollas"
La familia propietaria de la casa estaba considerando cubrir el trabajo con vidrio para protegerlo de daños, pero en menos de dos días la imagen ha sufrido una muestra de vandalismo. “BCC Wankers”, dice la pintada en rosa que tapa a la niña de Banksy, lo que puede traducirse como “BCC gilipollas” o “BCC idiotas”.
Estos actos sobre el trabajo del artista inglés no son nuevos. A principios de diciembre, un transeúnte destrozó otro de sus murales en Birmingham, añadiendo una nariz roja a dos renos que tiraban de un banco real del que Banksy se había valido. Aquel trabajo, que resaltaba el problema de las personas sin hogar en el Reino Unido, ha sido posteriormente protegido por un cristal.