La reacción de un niño en silla de ruedas al ver un anuncio con otro menor en silla de ruedas
"Oliver ve niños todos los días, pero nunca ve a niños como él. ¡Fue increíble!", recuerda la madre del niño que fotografió el momento y lo compartió en las redes sociales
El momento en el que Oliver se quedó paralizado frente al anuncio / FACEBOOK OLLIE'S WORLD
Madrid
Oliver es un niño de dos años que va en silla de ruedas por una malformación congénita a consecuencia del síndrome de Regresión Caudal. Hace unos días, estaba con su madre en un centro comercial en Arizona (Estados Unidos) y, de pronto, la mujer se encontró a su hijo paralizado frente a un anuncio de otro niño en silla de ruedas: "Lo miraba con asombro. Reconoció a otro chico como él, sonriendo en un expositor de Target. Oliver ve niños todos los días, pero nunca ve a niños como él. ¡Fue increíble!", rememoraba la madre en Facebook, donde compartió la imagen del niño atónito frente al póster.
"¡Estoy muy feliz de que otros niños que pasen por aquí con sus padres y vean esto! Se dedican muchos esfuerzos en representar la diversidad, pero representar a las personas con discapacidad es igual de importante", prosigue la madre del niño en sus redes sociales. Gracias a ese post, la fotografía se hizo viral y llegó hasta Colton, el niño que aparece en el anuncio y que vive en Massachusetts.
<p>El juego que un padre sirio ha inventado para que su hija no tenga miedo</p>
La madre de Oliver muestra el día a día de su hijo en una cuenta de Facebook llamada Ollie's World. En el perfil explica que el niño fue diagnosticado con Síndrome de Regresión Caudal (Agenesia Sacra) en una ecografía rutinaria a las 18 semanas de gestación. En muchas otras fotografías, comparte el enlace de la única asociación del mundo dedicada a los afectados por el síndrome de Regresión Caudal (iSACRA). Este síndrome es muy poco frecuente y consiste en que la médula espinal no se desarrolla por completo. En el caso de Oliver, "su médula espinal no está conectada a sus piernas y no puede moverlas o usarlas de ninguna manera", tal y como explica su madre. Además, el pequeño también tiene tres agujeros en su corazón y riñones ectópicos. La familia de Oliver utiliza las redes sociales para visibilizar la enfermedad y recabar apoyos. Hasta la publicación de esta fotografía nunca antes había tenido tanta repercusión su página de Facebook. "Realmente nos ha tocado el corazón ver cuántas otras personas se mantienen fuertes con nosotros acerca de la importancia de ilustrar la inclusión", señalan en su perfil días después de la publicación del anuncio. Oliver se ha convertido estas semanas en una "pequeña estrella de rock" en Estados Unidos. Multitud de medios se han interesado por su historia, que no es otra muy diferente a la que viven otros muchos niños en todo el mundo en silla de ruedas.
