Juan José Omella, nuevo presidente de la Conferencia Episcopal

Madrid

Juan José Omella, Cardenal Arzobispo de Bercelona, será el presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) durante los próximos cuatro años. Esta vez las quinielas se han cumplido y Omella, que era el principal favorito en unas elecciones en la que no hay nunca candidaturas oficiales, ha salido elegido de entre los 64 cardenales, arzobispos y obispos con opción al cargo. Representente del sector más moderado de la iglesia católica española se ha impuesto a los aspirantes más conservadores, entre ellos, el Cardenal Arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares,hasta ahora vicepresidente, y el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz, próximo a Rouco Varela.

Omella es el hombre del Papa en España junto al arzobispo de Madrid, Carlos Osoro. Quienes le conocen bien dicen de él que es un hombre "simpático y dialogante" y destacan su "plena sintonía con Francisco". Nacido en Cretas (Teruel) en 1946, cumplirá 74 años en abril. Fue designado por el Papa en 2015 para ponerse al frente de la diócesis de Barcelona. Ya entonces los vaticanistas vieron en él al hombre elegido por Francisco para dar un nuevo rumbo a la iglesia española.

Durante el "procés" intentó mediar sin éxito entre Rajoy y Puigdemont. En unos meses de muchísima tensión política y con la iglesia catalana al borde de la ruptura fueron constantes sus llamamientos a la concordia,  a tender puentes y a la convivencia.

Omella, por su caracter dialogante y conciliador, era el candidato preferido del Gobierno de Pedro Sánchez en un momento en el Ejecutivo que se plantea abordar cuestiones como la revisión del régimen fiscal de la iglesia para que pague el IBI,  las inmatriculaciones o devolver a su estatus anterior a la asignatura de religión para que no sea computable.

El cardenal arzobispo de Barcelona sustituye a Ricardo Blázquez (77 años), que finaliza su mandato como presidente de la CEE, cargo al que llegó en 2014 (fue reelegido en 2017), después de haberlo desempeñado anteriormente entre los años 2005 y 2008.

Blázquez se ha despedido ya de la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, (que ha asumido en esta legislatura la relación con las confesiones religiosas), con quien tuvo un encuentro la pasada semana. La ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática elogió tras esta reunión la figura de Blázquez, de quien aseguró que había sido un interlocutor "muy sensible" con todos los asuntos de interés mutuo, "acorde con los tiempos y las realidades que vivimos".