Ricky Rubio: "No debemos esconder las emociones"
El base español ha vuelto a pasar por 'La Ventana' con Francino y Pacojó, donde ha conversado con Leiva y ha contestado a las dudas de Víctor Claver sobre la meditación y cómo le ayuda
Madrid
El base de la NBA y de la selección ha vuelto a pasar por la SER y ha querido tener unas palabras para los que han perdido a algún ser querido en estos momentos. "Nunca te vas a levantar con ilusión después de eso, pero hay que aprender a vivir recordando las cosas buenas de la persona perdida", ha explicado reiterando la importancia de agarrarse a los valores de esa persona, como le ocurrió a él con su madre.
También ha recibido preguntas de los oyentes sobre cómo viven este confinamiento los niños. Para el jugador, es cierto que los niños necesitan salir y "gastar energía" y que es posible que ahora estén un poco inestables, con momentos tanto de risas como de llanto, especialmente si han perdido a alguien, pero que hay que dejar fluir esos sentimientos. "Hay que sentir. Si los niños tienen esa energía para reír, que rían. Y si la tienen para llorar, que lloren. No debemos esconder las emociones", ha señalado. Rubio tiene muy claro que en una situación como la que estamos viviendo ahora "tenemos que empatizar unos con otros".
Charla con Leiva
Rubio ha compartido unos minutos con el músico Leiva, que ha confesado que a la hora de componer es difícil para los músicos permanecer ajenos a todo lo que está ocurriendo pero ha recomendado "ser paciente" para que las canciones que surjan en este tipo de situaciones no queden como algo "pasajero".
Ambos han hablado también de lo que sienten cuando alguien les confiesa su admiración. "Yo solo juego bien al baloncesto y Leiva dirá que él escribe canciones y canta. Que es algo que nos sale de natural. Pero que me lo digan me da vergüenza", ha reconocido.
La meditación de Ricky
Pacojó ha sorprendido a Rubio con una pregunta de Víctor Claver, compañero en la selección, sobre la meditación, algo que práctica desde hace más de cinco años: "Empecé por lo que me pasaba con mi madre y me ayudó a relativizarlo mucho todo".
"Hay veces que el mundo se te echa encima y es necesario callar la mente. Los problemas no desaparecen, pero ves que se pueden solucionar más adelante", ha explicado antes de decir que no hay un único método de meditación, sino que se puede empezar por estar unos minutos en silencio o escuchando la respiración. "Así he aprendido a controlar las emociones. Las sigo teniendo, pero no me comen".