Francia apoya al automovil con 8.000 millones

París

Cerca de 8.000 millones de euros va a consagrar Francia a salvar su industria automovilística. La mayor parte de la ayuda será para el coche eléctrico y los híbridos "recargables". El presidente Emmanuel Macron ha anunciado que el objetivo es "hacer de Francia la primera nación de vehículos limpios, elevando la producción al millón de coches eléctricos e híbridos en cinco años". Pero ha exigido contrapartida a los fabricantes: que relocalicen e inviertan en Francia.

Macron ha condicionado el crédito estatal de 5.000 millones que ha solicitado Renault, a que sus dirigentes proporcionen "garantías a los asalariados" de dos de las plantas amenazadas de cierre. El próximo viernes el fabricante presentará un plan de ajuste de 2.000 millones.

La intención de París es que el sector salga de la crisis al tiempo que se acelera la transformación ecológica. Pero el reparto de subvenciones incluso para el mercado de segunda mano no va a contentar a los defensores del medio ambiente.

Hasta 12.000 euros

El plan incluye un aumento del "bono ecológico" a la compra de coches limpios. El incentivo será de 7.000 por la compra de un eléctrico (frente a los 6.000 actuales); y se crea un "bono" para los híbridos recargables de 2.000€. Además, el Gobierno francés introduce una "prima para la reconversión" de la flota, que es acumulable con las anteriores, y a cambio de la entrega del vehículo antiguo para desguace. Esta subvención será de 3.000 y 5.000, para híbridos y eléctricos, respectivamente. Sumando todas las posibilidades un francés podrá obtener una subvención de 12.000 euros en la adquisición de un E-auto, tras entregar el viejo.

Las ayudas serán válidas para compra de coches de motor combustible y que cumplan la norma europea de emisiones CO2 y partículas. Las empresas se han comprometido a invertir en Francia, tanto en baterías, motores y elevar los puntos de carga eléctrica a 100.000 ya el año que viene (desde los 30.000 en la actualidad).

Según el jefe del Estado, Renault ha anunciado entrar en el capital del consorcio de baterías franco alemán ("Airbus de baterías" en el que participan otros países europeos pero no España) . Y todas las baterías que ahora se fabrican en países asiáticos, deberán trasladar su producción a Francia. "Son ayudas extraordinarias para la mayor crisis en tiempos de paz", ha indicado Macron. La pandemia ha paralizado la venta de coches en Francia (han caído casi el 80% el último mes), un sector que emplea a 400.000 personas de forma directa y más del doble si se cuentan los servicios.