John Hume, una vida luchando contra la violencia
John Hume, uno de los grandes artífices de la paz en Irlanda del Norte
Londres
John Hume, uno de los grandes artífices de la paz en Irlanda del Norte, fallecido hoy en su ciudad natal de Derry a los 83 años, tenía un abuelo protestante y otro católico. Eso quizás le forjó como mediador entre dos comunidades enfrentadas en un espiral de violencia que se cobraría 3.500 vidas.
Educado en el catolicismo, nacionalista moderado, iba para cura, pero optó por dedicarse a la enseñanza. La lucha por los derechos civiles, contra la discriminación de los católicos frente a los unionistas protestantes, los abusos del ejército británico y la policía norirlandesa, le llevaron a la política. Así se convirtió en una figura determinante durante más de 30 años, los más duros y sangrientos en la provincia.
Confundador en los años 70, y más tarde líder del centrista Partido Social Demócrata y Laborista (SDLP), criticó abiertamente la lucha armada de los paramilitares, apuntando directamente al IRA, lo que pudo haberle costado caro. "No hay una sola injusticia en Irlanda del Norte hoy, que justifique la muerte de un solo ser humano", llegó a declarar en su momento. Eso no impidió que, en la búsqueda de una solución pacífica al conflicto norirlandés, en los años 80 entablara negociaciones secretas con el líder del Sinn Féin, Gerry Adams, un paso muy arriesgado, que le valió grandes críticas. Persistente, perseverante, seguro de que ese era el camino, Hume consiguió convencer a los republicanos para que declararán el alto el fuego, lo que permitió el inicio de las negociaciones con el resto de las fuerzas noirlandesas y los gobiernos de Londres y Dublín. Aquel proceso desembocaría en los Acuerdos de Viernes Santo en 1998. Ese año Hume y el unionista David Trimble recibieron el Nobel de la Paz. "La gran mayoría de los conflictos versan sobre lo mismo. Sobre diferencias, ya sea de religión, nacionalidad o raza", declaró en su discurso de agradecimiento por el galardón. "La diferencia entre unos y otros" añadió, "es un accidente en el momento del nacimiento. Uno podría haber nacido en la otra comunidad".
Hume fue también un eurodiputado convencido de la importancia de formar parte de Europa. "Me pregunto qué habría sido de Irlanda del Norte sin la Unión Europea", declaró en su día.
Apartado del a política hace años a causa de la mala salud, su muerte ha propiciado tributos desde todas las comunidades y credos en Irlanda. "Tengo que decir que no hubiéramos podido disfrutar de la paz que hoy tenemos, si no fuera por John", ha reconocido Adams.
"Hume fue un visionario, que se negó a creer que el futuro debe ser igual que el pasado". ha señalado el exprimer ministro laborista, Tony Blair. "Su contribución a la paz en Irlanda del Norte fue extraordinaria. Sin él no creo que nunca hubiéramos podido sacar el proceso de paz adelante."