La pandemia en cinco años: desde una vacuna poco eficaz a una población vacunada con inmunidad duradera
Un estudio de las universidades de Harvard, Princeton y Columbia predice un modelo sobre cómo afectará el coronavirus en el mundo en los próximos cinco años

Un científico probando una vacuna contra el COVID-19. / Getty Images (Getty Images)

Madrid
Cuánto durará la pandemia es una de las preguntas más repetidas desde que el coronavirus apareció en nuestras vidas cambiándolas por completo. La espera de una vacuna efectiva y segura tiene a la población en vilo, aunque los expertos aseguran que no será suficiente para erradicar la pandemia.
Así, un grupo de científicos de las universidades de Harvard, Princeton y Columbia han publicado un estudio publicado en la revista Science en el que han desarrollado un modelo predictivo que recoge una serie de variables como la inmunidad al COVID-19, el grado de vacunación de la población e incluso el clima de cada lugar y otros elementos no farmacológicos para ver cómo afectará el virus en todo el mundo en los próximos cinco años.
Después de analizar los citados factores, los investigadores han determinado los cuatro posibles escenarios tras cinco años de pandemia. "La trayectoria futura de la pandemia depende de la dinámica de la inmunidad contra el SARS-CoV2. Sin embargo, las características de la respuesta inmune provocada por la infección natural o la vacunación aún son inciertas", cuentan los autores del estudio.
A través de modelos epidemiológicos simples han explorado y estimado la magnitud y el momento en se producirán los futuros casos de COVID-19, "teniendo en cuenta la diferente eficacia protectora y duración de la respuesta inmune, así como su interacción con vacunas e intervenciones no farmacéuticas".
Los científicos observan en la investigación que las "variaciones en la respuesta inmune a las infecciones primarias por SARS-CoV-2, y una posible vacuna, pueden conducir a paisajes inmunes dramáticamente diferentes y cargas de casos críticamente severos, que van desde epidemias controladas hasta casi la eliminación".
Primer escenario: sin vacuna y con inmunidad poco duradera
El primer escenario que plantean es el más pesimista: uno sin vacunas y con una respuesta inmune más corta en el tiempo. Además, en este supuesto se plantea una segunda ola con el 21% de casos de gravedad severa.
Segundo escenario: sin vacuna, pero con inmunidad más duradera
Este escenario sigue sin plantear una vacuna para los próximos cinco años, pero se logra una inmunidad de mayor calidad. En esta situación, solo el 7% de los casos de la segunda ola serían de gravedad severa.
Sin embargo, los autores del estudio advierten que "confiar en la respuesta inmunitaria de un individuo como principal observable durante una epidemia en curso, no es suficiente para caracterizar el complejo panorama inmunológico generado". Por ello, consideran imprescindible estudiar la duración y el control de la transmisión, así como la inmunidad clínica después de la infección primaria y vacunación, las variaciones poblacionales e individuales de los parámetros, como edad, sexo, etc, y el impacto de la evolución viral.
Tercer escenario: con vacuna y inmunidad natural poco duradera
En el escenario de que se desarrolle la vacuna y comience a implantarse, junto a las personas que se hayan inmunizado tras superar el coronavirus, aunque con una inmunidad de baja duración, los científicos creen que el control de la epidemia podría ser posible. "La vacunación reduce sustancialmente los picos subsiguientes en los casos clínicamente graves, aunque en el futuro pesimista pueden producirse picos de infección posteriores dominados por infecciones secundarias", explican los científicos.
Cuarto escenario: con vacuna e inmunidad natural duradera
En esta situación la vacuna sería masivamente distribuida y la población podría ser inmunizada a largo plazo. Según este modelo, desaparecerían los casos severos de coronavirus tras el primer año de implantación de la vacuna. "Si hacemos suposiciones optimistas con respecto a la naturaleza la respuesta inmune adaptativa, una proporción suficiente de individuos completamente susceptibles pueden ser inmunizados para suprimir brotes futuros, dentro de un periodo de cinco años", concluían los científicos.




