Madrid inicia un lento regreso a la normalidad tras el paso de Filomena
Barajas retoma esta tarde su actividad de forma paulatina y Madrid recupera el servicio ferroviario de largo recorrido
Se prevé una ola de frío que durará hasta el próximo jueves con mínimas de -10 grados
Madrid
Tras el paso de la borrasca Filomena, que trajo consigo la mayor nevada en medio siglo, Madrid ha emprendido este domingo un regreso a la normalidad que se demorará durante varios días, y que mantendrá suspendidos buena parte de los servicios públicos de la región como mínimo hasta el miércoles. Aunque la nieve ha dado tregua, Madrid afronta una semana de heladas generalizadas. En toda la región hay alerta amarilla por temperaturas mínimas bajo cero esta madrugada, que oscilarán entre -3 y -9 grados.
OBJETIVO: RECUPERAR LA MOVILIDAD
Por esa razón, los esfuerzos se han concentrado en retirar la nieve para restablecer la movilidad antes de que se congele. El Gobierno regional ha garantizado los accesos a las principales carreteras de la región, y ahora los servicios están dedicados a abrir camino en las vías secundarias. En la capital, un dispositivo de 135 máquinas quitanieves y 6.220 operarios ha logrado desbloquear varias arterias principales de la ciudad y la M-30, donde el Ayuntamiento ha pedido no ir a retirar los vehículos abandonados, que serán trasladados gratuitamente a un depósito municipal.
El alcalde, José Luis Martínez-Almeida, ha pedido a los vecinos que no ocupen las calzadas para no obstaculizar las quitanieves, y ha recordado que el "mínimo de movilidad" que intenta garantizarse va dirigido esencialmente a los servicios públicos y de emergencias y no a vehículos privados, que sólo deben circular "en casos imprescindibles" y usando cadenas. Tanto él como la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso, han llamado a la colaboración ciudadana para retirar la nieve, especialmente en voladizos, cornisas, balcones o aparatos de aire acondicionado, y han sido múltiples las quedadas vecinales organizadas para este fin.
Almeida ha asegurado que valora solicitar la declaración de zona catastrófica para la capital, pero el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha afirmado que la situación de Madrid no se ajusta a dicha categoría, puesto que la nevada no ha originado daños en bienes públicos o privados, como sucedió con las danas.
TRANSPORTE PÚBLICO BAJO MÍNIMOS
Por lo general, la red de transporte público de Madrid continúa operando a un ritmo muy inferior al habitual. La excepción es Metro, que al igual que anoche seguirá abierto durante toda la noche del domingo al lunes. El servicio de Cercanías se ha reanudado progresivamente desde el mediodía, pero siguen sin funcionar los autobuses urbanos e interurbanos del Consorcio Regional de Transportes y los de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de la capital.
Ya no quedan conductores atrapados por el temporal en las carreteras de la región aunque medio millar de personas han tenido que pasar la noche en distintas dependencias municipales. En cuanto al transporte más allá de las fronteras madrileñas, el aeropuerto de Barajas comenzará a operar de manera "muy gradual" a lo largo de esta tarde, mientras que ya han salido los primeros trenes de larga distancia, con destino a Santander, Málaga o Ferrol.
SERVICIOS SUSPENDIDOS
La mayoría de servicios y equipamientos públicos seguirán clausurados al menos dos días más. Los centros educativos de toda la región cerrarán lunes y martes, y aunque el propósito es abrir el miércoles, la decisión definitiva no se tomará hasta que se vea cómo evoluciona el temporal, y no se descarta retrasar aún más la vuelta a clase tras las vacaciones navideñas. En las residencias de mayores y personas con discapacidad dependientes de la Comunidad, la actividad presencial en atención diurna y temprana ha quedado interrumpida hasta el miércoles.
La Comunidad cerrará al menos hasta ese mismo día las oficinas de empleo -que atenderán telemáticamente- y todos sus centros culturales, salas de exposiciones, museos y bibliotecas. También permanecerán clausurados los monumentos de Patrimonio Nacional en la región. Sigue suspendida la recogida domiciliaria de basuras en la capital, por lo que el Ayuntamiento de Madrid estudia instalar contenedores provisionales en puntos estratégicos para poder reanudar el servicio.
EL ABASTECIMIENTO, GARANTIZADO
El paso de la borrasca forzó ayer el cierre de algunas cadenas de alimentación, comercios de proximidad y grandes centros, lo que ha hecho que los que han podido abrir este domingo hayan tenido largas colas en su exterior.
Como ya ocurrió durante los primeros días de confinamiento, en el mes de marzo, en algunos supermercados vuelven a contemplarse estanterías vacías de algunos productos básicos, como carne y fruta, y de nuevo el papel higiénico a vuelto a agotarse en algunos sitios.
La vicealcaldesa de la capital, Begoña Villacís, ha asegurado este domingo que el abastecimiento de Madrid está garantizado, y que espera que Mercamadrid pueda reanudar plenamente su actividad el martes.
DAÑOS MATERIALES Y LUGARES INCOMUNICADOS
Como ha admitido el propio Almeida, pasarán días hasta que se pueda hacer una valoración precisa de las consecuencias del temporal, pero ya ha habido quien se ha llevado la peor parte de la nevada, en forma de desperfectos materiales o de aislamientos forzados respecto al resto de la región.
El primero de los casos se ha dado, por ejemplo, en el instituto Ramiro de Maeztu de la capital, donde la sede principal de la cantera del Estudiantes, la conocida como 'Nevera', se ha derrumbado por el peso de la nieve. Por otro lado, la borrasca ha dejado incomunicados a gran parte de los municipios de la Comunidad de Madrid donde no operan los servicios de transporte urbano y muchos vecinos han sufrido problemas con el suministro eléctrico.
La pedanía ribereña del Real Cortijo de San Isidro (Aranjuez) ha pasado al menos 30 horas sin suministro eléctrico, problema que también ha afectado a la colonia de Mingorrubio de la capital, la localidad de Villalbilla, las urbanizaciones de Colmenar de Oreja o el municipio de Valdelaguna.
Los ayuntamientos de Boadilla del Monte, Las Rozas y Majadahonda han tenido que hacer uso de los polideportivos para acoger a personas de otras localidades que se han quedado aisladas a causa de la borrasca.
La situación ha mejorado notablemente en los pueblos de la Sierra Norte que ayer quedaron incomunicados, como Puebla de la Sierra o La Hiruela, donde los quitanieves pasaron a última hora del sábado, habilitando los accesos y permitiendo el restablecimiento de la circulación. En la Cañada Real, donde los sectores 5 y 6 llevan más de tres meses sin luz, la Comunidad de Madrid repartirá el lunes 120 botellas de butano y 100 estufas de gas.
Los bomberos de la Comunidad de Madrid han realizado, hasta las doce de la mañana de este domingo, 1.167 intervenciones relacionadas con la borrasca, como retirar ramas y árboles de la vía pública, rescatar a personas atrapadas en sus vehículos o asistir dificultades sanitarias leves.