La vacuna española planea empezar en primavera los ensayos clínicos con más de un centenar de voluntarios

Madrid

A sus 76 años, el virólogo del CSIC Mariano Esteban lidera el proyecto español de vacuna contra la COVID-19 que va más adelantado. Tras obtener una eficacia del 100% en 22 ratones de laboratorio, en marzo pueden comenzar ya la primera fase de ensayo clínico en humanos, con la participación de 112 voluntarios. Si todo va bien, en el ensayo en fase 3, podrían participar unas 30.000 personas.

Tras la preceptiva autorización por parte de la Agencia Española del Medicamento, en primavera, está previsto que se pueda realizar la fase 1 de los ensayos clínicos y este virólogo espera que su candidato vacunal nos protegerá del SARS-CoV-2 con una respuesta inmune "más amplia y más duradera", según él mismo explica en una entrevista que se publica en la página web de CSIC.

Sin embargo, para Mariano Esteban, "no habrá una vacuna ganadora, sino varias que iremos combinando para lograr una protección mayor".

Para este veterano investigador, la vacunación es el remedio más eficaz. De hecho, en Israel, donde ya se han vacunado dos millones de personas, el porcentaje de infecciones ha disminuido entre un 40 y un 60%.

Distinta base

Esta vacuna del CSIC es distinta a las Pfizar y Moderna (las primeras en ser aprobado su uso en humanos) porque se basa en un virus muy atenuado, que tiene una cubierta membranosa alrededor de una estructura proteica y en su interior lleva una molécula de ADN mayor que la del adenovirus. En esta molécula se ha incrustado también el fragmento que va a producir la proteína S del coronavirus.

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Como vehículo se usa el virus vaccinia (que se ha empleado en la vacunación que ha logrado erradicar la viruela en todo el mundo). Estos virus han sido diseñados por la naturaleza para penetrar fácilmente en células, por lo tanto, según Mariano Esteban "nuestro diseño de vacuna posibilita que la respuesta inmunitaria en las personas sea mucho más amplia y duradera. Eso se vio cuando se vacunó a la población contra la viruela y se erradicó la enfermedad".

Efectos adversos

Sin embargo, hay casos excepcionales en los que algunas personas (del orden de 1 entre un millón) pueden tener un efecto adverso serio, pero, según este investigador del CSIC, "de momento vemos que en las vacunas actuales los efectos son muy llevaderos. Es lo habitual en estos medicamentos. Ya se ha vacunado a varios millones de personas y las reacciones son mínimas".

El riesgo es pequeño y el beneficio, enorme. De hecho, gracias a la vacuna se ha erradicado la viruela "y estamos a punto de erradicar la polio. Y en enfermedades como el sarampión o la hepatitis, las vacunas han demostrado su eficacia, al igual que frente a otras enfermedades bacterianas y víricas", concluye Mariano Esteban