Miles de personas asisten al funeral de un rabino en Israel sin medidas contra la COVID-19 pese a la pandemia
El acto se ha convertido, en parte, en un desafío a las restricciones contra el coronavirus en el país
Tel Aviv
Miles de judíos ultraortodoxos han asistido este domingo con poca o ninguna protección al funeral de un destacado rabino, en lo que se ha convertido, en parte, en un desafío a las restricciones contra el coronavirus en Israel que ha generado una enérgica condena de Benny Gantz, socio de coalición del primer ministro Benjamin Netanyahu.
Más información
"Así es como se ve el doble rasero en la aplicación de la ley: millones de familias y niños están encerrados dentro de sus hogares y acatan las reglas, mientras miles de ultraortodoxos se congregan en un funeral", ha escrito en Twitter el también ministro de Defensa y líder de la coalición Azul y Blanco.
La mayoría de los presentes en el funeral del rabino Meshulam Dovid Soloveitchik no llevaban mascarilla, ha acusado Gantz, antes de rematar su mensaje con un aviso: "O cerramos para todos o abrimos para todos".
Se debate la extensión de las medidas restrictivas en Israel
El gabinete de unidad de Netanyahu y Gantz se reunirá esta tarde para discutir la extensión del tercer cierre, que expira a la medianoche, en un nuevo acercamiento entre los dos antiguos rivales, cuya tensa cooperación se ha disparado en medio de una disputa sobre el presupuesto estatal 2020-21.
Gantz advirtió que no apoyará la extensión del cierre durante una semana más, a menos que la Policía haga cumplir las violaciones por parte de miembros de la comunidad ultraortodoxa que ignoran las regulaciones. También ha abogado por multas más altas y por la aprobación de una medida para cerrar, sin previo aviso, aquellas instituciones educativas que abren desafiando el cierre.
Israel, un país de 9,3 millones de habitantes, ha registrado 4.768 muertes relacionadas con el coronavirus, pero ya ha administrado la primera dosis de la vacuna Pfizer / BioNTech a más de 3 millones de personas. Más de 1,7 millones han recibido también la segunda dosis.