'Trigo limpio', de Juan Manuel Gil, Premio Biblioteca Breve 2021
El autor construye en 'Trigo limpio' una falsa historia de detectives en la que muestra su fascinación por la infancia perdida y la literatura
Madrid
El escritor y profesor almeriense Juan Manuel Gil Martínez ha sido galardonado este lunes con el Premio Biblioteca Breve 2021, dotado con 30.000 euros, que concede la editorial Seix Barral desde 1958, con su novela Trigo limpio. Se trata de una falsa novela de detectives que, según el jurado, "narra con asombrosa agilidad y desde el humor la fascinación por la infancia perdida en un barrio periférico, así como la naturaleza de la fabulación literaria a través de pasadizos que conectan las lecturas que todos llevamos dentro".
El jurado, formado por Pere Gimferrer, Olga Merino, Raquel Taranilla, Elena Ramírez y Enrique Vila-Matas, ha destacado que la novela Trigo Limpio ha sido elegida ganadora "por unanimidad", imponiéndose entre los 967 manuscritos presentados este año al galardón.
Tras conocerse el fallo, el autor ha explicado que su novela, situada en un barrio obrero de Almería a principios de los años 90, parte de "un deseo de trasladar al lector la fascinación que yo siento por la literatura" a través de una historia construida a partir de "la imagen de un niño que corre por la pista de un aeropuerto cuando un avión está a punto de aterrizar". Muchos años después, uno de los amigos de ese chaval en aquella época, Simón, le escribe un correo electrónico en el que le pregunta ¿por qué no escribes sobre nosotros?
Según su autor, Trigo limpio es una novela "en la que nada es realmente lo que parece, en la que se confunde al autor con el narrador, en la que no sabemos dónde está la frontera entre la realidad y la ficción, así que el título debía ser Trigo limpio porque el juego empieza desde el título y la portada".
La historia de Trigo limpio se desarrolla en Almería a principios de los años noventa, en escenarios como la playa y los búnkeres de la guerra civil repartidos por la costa andaluza; las fábricas abandonadas; los descampados; la Cueva del Rascacio; el aljibe árabe de la época musulmana que, dicen, escondía un pasillo subterráneo que lo unía con el mercado de abastos y en una época, los 90, "marcada por la especulación inmobiliaria y el ladrillazo: muchos de estos paisajes tienen los días contados y pronto pasarán a alojar aeropuertos, hospitales y viviendas", explica la editorial.
El almeriense ha señalado que en esta novela emplea "el humor, la oralidad y el amor por libros que están llenos de otros libros y el poder de la palabra, que ilumina sitios oscuros" y con este galardón ha "cumplido un sueño y lo he mejorado". Gil Martínez, que escribió esta historia coincidiendo con el nacimiento de su hija y en pleno permiso de paternidad, se la dedica "a mi barrio y a todas las personas que han vivido el dolor de manera directa en esta época terrible que estamos viviendo".
Juan Manuel Gil Martínez, nacido en Almería (1979), es escritor y profesor. Formó parte de la primera promoción de residentes de la Fundación Antonio Gala. Con su primer libro, Guía inútil de un naufragio (2004), obtuvo el Premio Andalucía Joven de Poesía. Desde entonces se ha centrado en la novela: Inopia (2008), Las islas vertebradas (2017) y Un hombre bajo el agua (2019). Es autor, además, de dos volúmenes de difícil clasificación: Mi padre y yo. Un western (2012), que le valió el Premio Argaria, e Hipstamatic 100, una recopilación de textos en los que mezcló vida y actualidad.
El fallo del premio Biblioteca Breve se ha celebrado en el Museo Marítimo de Barcelona, en una ceremonia emitida en streaming por Youtube y redes sociales, y ha comenzado con un homenaje al escritor Juan Marsé, fallecido en julio de 2020, a cargo de Enrique Vila-Matas, que ha recordado el consejo que le dio el autor de Últimas tardes con Teresa cuando le encargaron escribir un artículo: "procura divertirte", le dijo. Vila-Matas ha compartido otras anécdotas vividas con el escritor: aquel día en que “un pintor que triunfaba en Nueva York” acudió a la tertulia que compartían y les preguntó "qué pensaban de los gobernantes" y de repente Marsé dijo: “aquí estamos en contra de todo”. "Era un hombre de una sola pieza y lo que devoraba era el turbio polvo flotando en la estela de sus sueños, y sobre los sueños", ha dicho Vila-Matas, Marsé "había montado una obra de hombre entero".