Páez afirma que Rajoy mantuvo a Bárcenas en el PP tras su imputación
El exgerente del PP quiebra el discurso oficial del partido y sostiene que el expresidente Rajoy mantuvo a Bárcenas al frente del área económica después de su imputación en el caso Gürtel y de que hubiera dimitido de todos sus cargos
El exgerente Páez, pese a su enemistad con Bárcenas, corrobora gran parte de su tesis en su declaración como acusado en el juicio por los usos de la caja b del PP
Madrid
Sin pretenderlo, porque quedó claro que guarda una profunda animadversión hacia Luis Bárcenas, a quien "tenía miedo" tras un episodio de supuestas "amenazas" que acabó con el lanzamiento de un "mechero", el exgerente del Partido Popular, Cristóbal Páez, confirmó gran parte de la tesis del extesorero y de paso, quebró el discurso oficial del PP.
Páez compareció este miércoles como acusado en el juicio por los usos de la caja b del PP y admitió tanto la recepción de dos "gratificaciones" que sumaron 12.000 euros, tal y como figuran en los papeles de Bárcenas, como la operación de pago en negro de la sede de Pontevedra, denunciada por el extesorero. Y aunque aseguró que no llegó a estar al corriente de la doble contabilidad, manifestó que "asumía" su existencia.
Rajoy mantuvo a Bárcenas hasta el final
El exgerente del PP narró con detalle cómo se enturbió su posición en el partido que concluyó con su despido en 2010 y el papel de Mariano Rajoy, quien en contra de lo aseverado por el PP, mantuvo a Bárcenas en el partido hasta el final.
Afirmó ante el tribunal que después de la imputación de Luis Bárcenas en el caso Gürtel y de que oficialmente hubiera dimitido de sus cargos, la tesorería del partido fue asumida por la secretaria general, María Dolores de Cospedal, a quien el gerente Páez debía ofrecer las oportunas explicaciones sobre los asuntos económicos.
Pero Bárcenas "seguía yendo porque se lo permitían" a la sede central de Génova 13 y reclamaba a Páez que las novedades sobre las finanzas del PP se las transmitiera a él y no a Cospedal, quien le pedía lo contrario.
El episodio del "mechero"
Inmerso en una "situación incómoda" por encontrarse en el "fuego cruzado" entre ambos, Cristóbal Páez pidió consejo "una mañana" al exministro Ángel Acebes, y "dos horas más tarde" le citó Bárcenas a su despacho. Según Páez, el extesorero le recibió "furioso" y tras lanzarle "un mechero" que esquivó, le dijo que estaba "acabado, muerto" y se marchó.
Páez ha narrado que "tenía miedo" porque Bárcenas en aquella época "estaba desquiciado" y era muy "violento". Hasta tal punto que según ha dicho, creyó que le iba "a matar". El exgerente se fue a su domicilio, pero regresó unos días más tarde al ser citado a una reunión junto al propio Bárcenas y Mariano Rajoy.
Reunión con Rajoy
En aquel cónclave, según Páez, el expresidente Rajoy intentó suavizar la situación entre ambos, les pidió que hablasen y se comprometió con Páez a respetar su parcela de trabajo y le dijo que despachase los asuntos económicos con Cospedal. Pero a pesar de las palabras del presidente, Bárcenas continuaba acudiendo al partido y no solo despachando con los trabajadores del área económica, sino ordenándoles que no pasaran su información a Páez.
"Preocupado", Páez habló de nuevo con Cospedal quien le manifestó que "mientras ella fuera secretaria general él continuaría siendo el gerente" pero "15 días después" se comunicó de nuevo con él para decirle que "le había llamado Rajoy" quien había "pensado en cambios" en su área que le abocaban al despido.
Rajoy propone a Páez que siga con su sueldo pero sin funciones
Cristóbal Páez pidió una cita con el presidente porque "quería oír de su boca" cuál era la situación, y Rajoy le dijo que iba a hacer cambios, le afeó que se hubiera marchado a su casa tras su enfrentamiento con Bárcenas y le propuso continuar con su sueldo y despacho pero sin función alguna. Páez afirma que se negó porque no quería ser "una momia" sin nada que hacer y negoció su salida del PP.
El relato de Cristóbal Páez confirma, de ser cierta su versión, que Mariano Rajoy optó por Bárcenas en el conflicto con Cospedal, que le mantuvo en sus funciones al mando de las finanzas del PP a pesar de que oficialmente había dimitido y que fue falso el "despido en diferido" argumentado por Cospedal. El partido, según la declaración de Páez, solo prescindió realmente de Bárcenas cuando el diario El País publicó sus papeles manuscritos a finales de enero de 2013. Ni siquiera después de que unas semanas antes, se hiciera pública su fortuna de 48 millones de euros en Suiza.
En su declaración, Cristóbal Páez ha negado conocimiento alguno de que parte de las obras de la sede central del PP fueran abonadas con dinero negro, aunque el fiscal Anticorrupción, Antonio Romeral, ha evidenciado la dificultad de creer esta parte del testimonio porque llegó a firmar facturas por el 60% de la obra sin que el documento hiciera referencia a que se trataba solo de ese porcentaje y no del total. ¿Cómo podía el gerente saber cuánto faltaba por pagar?. No era su responsabilidad, ha declarado. Dice que solo se encargaba de la obra "física"