Acebes atribuye la responsabilidad de reformar la sede del PP a un adjunto a la gerencia del partido
Afirma como testigo en el juicio que "la iniciativa" de acometer la millonaria y bajo sospecha obra fue del adjunto Cristóbal Páez, y que de los pagos se encargaba la tesorería, desvinculando al partido de cualquier decisión y responsabilidad al respecto
"Yo me enteré cuando ya se había tomado la decisión" por parte de Páez y el área económica, asevera el entonces secretario general. Acebes también niega el cobro de sobresueldos
Imagen de archivo de Ángel Acebes / EFE
Madrid
El exministro y exsecretario general del Partido Popular, Ángel Acebes, ha negado en su declaración como testigo en el juicio sobre los usos de la caja b del PP, conocimiento alguno de la misma, su existencia pese a que ya ha sido declarada probada por el Supremo, y que él o su partido tuvieran responsabilidad alguna o realizaran un seguimiento de la millonaria obra de reforma de la sede central del PP en la madrileña calle de Génova 13.
A Páez "le hacía mucha ilusión" reformar la sede
Acebes ha afirmado que la iniciativa de acometer la obra en 2005, por la que según la investigación se pagaron 1.5 millones en negro, fue de un adjunto a la gerencia como Cristóbal Páez, que llevaba pocos meses en el cargo pero a quien le "hacía mucha ilusión" el proyecto. Por lo que respecta a los pagos, según Acebes, se encargaba el área económica que dirigía entonces el tesorero Álvaro Lapuerta.
Ángel Acebes, quien ocupaba en aquellas fechas la secretaría general del partido y por tanto era el número dos de facto de la organización, ha dicho ante el tribunal que se enteró cuando la decisión de reformar el edificio ya había sido adoptada. El único control que llevaba el partido sobre la obra eran los presupuestos que de forma anual aprobaba el comité ejecutivo nacional del PP, según el exsecretario general.
Niega el cobro de 107.100 euros en sobresueldos
Acebes declaraba como testigo, y por tanto, con obligación de decir verdad, y también ha negado el cobro de sobresueldos de hasta 107.100 euros, que aparecen en distintas entregas en la contabilidad manuscrita de Bárcenas. De forma "rotunda y tajante" ha aseverado que "jamás" ha cobrado nada fuera del circuito oficial y sin pagar impuestos. Una negativa igual de rotunda que la ya expresada por el mismo testigo sobre idénticos hechos en el juicio por la primera época de la Gürtel, y al que los magistrados restaron credibilidad.
El exministro ha reconocido reuniones en 2004 con el entonces presidente del medio Libertad Digital, Alberto Recarte, quien les pidió su mediación ante empresarios para que les ayudaran en la adquisición de acciones de cara a su ampliación de capital, pero ha negado que autorizase la compra mediante fondos de la caja b del partido.
El exsenador Luis Fraga avala la caja b
Este lunes también ha declarado Luis Fraga Eguskiaguirre, exsenador del PP y sobrino de Manuel Fraga Iribarne, quien ha admitido que percibió los dos pagos por un total de 9.000 euros en metálico que figuran anotados en la contabilidad b. Dice que era dinero para sus gastos de campaña electoral.
Fraga, amigo personal de Bárcenas, ha declarado que el extesorero es un hombre de "total credibilidad" y ha ofrecido su versión respecto a la fortuna de 48 millones que llegó a tener en Suiza. Sostiene que Bárcenas es "un genio en la Bolsa" y un "gran hombre de negocios". Condiciones que "ni usted ni yo seguramente tendremos" nunca, ha finalizado el exsenador.
