La justicia reconoce que la muerte de José María Íñigo fue por inhalar amianto en los estudios de TVE
Una sentencia dictada por el Juzgado de lo Social número 2 de Madrid declara que la pensión de viudedad reconocida a la viuda del periodista y presentador José María Íñigo deriva de una enfermedad profesional consecuencia del amianto presente en Estudio 1 de TVE
Madrid
Un juzgado de Madrid ha sentenciado que el presentador José María Íñigo falleció en 2018 por un cáncer provocado por el amianto con el que estuvo en contacto durante años en el Estudio 1 de Prado del Rey de Radio Televisión Española mientras presentaba progamas como Directísimo, Fantástico o Estudio Abierto en las décadas de los setenta y los ochenta. La sentencia, que es recurrible, implica que su muerte derivó de una enfermedad profesional.
José María Íñigo es considerado como una de las grandes figuras de la televisión en España. Empezó su andadura en TVE a finales de los años sesenta trifunfando con programas con Estudio Abierto o Esta Noche... Fiesta además de comentando la gala de Eurovisión en la cadena pública entre otros muchos éxitos. Falleció en mayo de 2018 a los 75 años víctima de un cáncer muy específico: un mesotelioma que, en un 90% de los casos, se relaciona con la exposición continuada al amianto.
Un amianto que, según destaca ahora el juzgado de lo social nº 2 de Madrid, estuvo durante décadas en las paredes de ese estudio y causó en última instancia la muerte del presentador. Para la magistrada María del Carmen Cano "existen elementos sólidos para afirmar que el fallecimiento fue consecuencia de la exposición al amianto que se produjo" entre 1975 y 1985. Por ello, dice la sentencia, "se ha de considerar que la contingencia del fallecimiento es enfermedad profesional".
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La sentencia, que todavía es recurrible ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, implica que el fallecimiento del presentador por el que se ha reconocido una pensión de viudedad a su esposa procede de una enfermedad laboral ubicando en cuanto a la responsabilidad empresarial varios periodos entre 1975 y 1985. Es decir, cuando iba varios días a la semana a Prado del Rey a preparar y presentar los progamas que le lanzaron al estrellato y le convirtieron en una de las grandes figuras de la televisión en España.
Amianto friable
La sentencia explica que el amianto del Estudio 1 se puso para aislar la estancia del ruido y se empezó a intentar encapsular a mediados de la década de los ochenta hasta su retirada definitiva hace menos de un lustro. El amianto, explica, era friable y por tanto se podía desprender y liberar fibras por choques, movimiento o vibraciones: como las producidas por las actuaciones musicales, los ventiladores o los aplausos y gritos del público que acudía a ver sus programas.
Además, dice la Justicia, "no se puede obviar que el 90% de este tipo de tumor viene ocasionado por la exposición al amianto, y el hecho de que no sea desarrollado por otras personas sometidas a la misma exposición en las misma circunstancias, se debe a que existe una predisposición genética que determina o no el desarrollo de la enfermedad" tal y como afirmó durante el proceso uno de los peritos.
En un comunicado recogido por EuropaPress, el despacho de abogados Opamianto considera que de esta forma queda acreditado que en los estudios de Radio Televisión Española había amianto. José María Íñigo trabajó intermitentemente para RTVE desde 1.974 en programas tan emblemáticos como 'Directísimo', 'Fantástico' y 'Estudio Abierto' entre otros muchos pasando largas e intensas jornadas de trabajo.