"Son los Monty Python": la desternillante confusión de unos militares de Uzbekistán en pleno himno nacional
Los militares no fueron capaces de coordinarse cuando comenzó a sonar el himno
Madrid
El humor de Monty Python traspasó fronteras por gracias, entre otras cosas, a las situaciones inverosímiles que presentaban en cada uno de sus gags. Desde el ministerio de los andares tontos, sin duda alguna uno de los más populares del grupo británico de humoristas hasta otros como el relacionado con la inquisición española. Sin embargo, el paso del tiempo nos ha demostrado que las situaciones que reflejaban en sus actuaciones tampoco distaban mucho con las que vemos a diario en el mundo real.
El último ejemplo que demuestra que las disparatadas historias de los Monty Python no estaban muy lejos de la realidad se ha producido hace apenas unos días en Uzbekistán. Concretamente el pasado 9 de mayo, cuando el país asiático celebraba el Día de la Memoria y el Honor. Una celebración, que rememora la contribución de la Unión Soviética a la victoria sobre el fascismo en la Segunda Guerra Mundial, en la que se bendice a todos aquellos héroes y heroínas que sacrificaron sus vidas por su país.
Así ha sido la desternillante anécdota de los militares kazajos
Como no podía ser de otra forma, y dado que se trataba de un evento en el que se honraba la figura de los héroes y heroínas uzbecas durante la Segunda Guerra Mundial, el himno nacional del país sonó en varias ocasiones como homenaje a quienes lucharon para acabar con el fascismo. En una de estas ocasiones se produjo un momento desternillante que ha dado la vuelta al mundo gracias al poder de las redes sociales.
En el vídeo en cuestión, que se ha popularizado en distintas regiones el planeta en cuestión de días, podemos ver al jefe de la administración local, Gofurjon Mirzaev, echándose la mano del corazón tras escuchar los primeros compases del himno nacional. Tras él, cuatro militares del gobierno que no sabían muy bien qué hacer tras la reacción de Mirzaev. Mientras que los tres primeros se echaban la mano a la cabeza en forma de saludo, el cuarto no lo tenía demasiado claro.
Una escena más propia de los Monty Python
Después de que el cuarto de los militares siguiera los pasos del jefe de la administración local y se llevara la mano al pecho, dos de ellos decidieron acompañarle y hacer lo propio. Sin embargo, el primero de ellos continuaba con la mano en la cabeza, lo que llevó al segundo y al tercer militar a cambiar de nuevo de parecer. De hecho, y con el objetivo de convencer al cuarto militar, uno de ellos le dio un ligero golpe en el costado para que cambiara su disposición.
Finalmente, los cuatro militares acababan con la mano en la cabeza mientras Gofurjon Mirzaev escuchaba el himno con la mano pegada al corazón. Una anécdota que no han pasado por alto las redes sociales, quienes han asegurado que parece una escena más propia de Monty Python.
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...