Villarejo afirma que se escribía con Rajoy por la 'Operación Kitchen'
El comisario jubilado afirma en la comisión del Congreso que investiga este supuesto caso de corrupción que el expresidente del Gobierno contactaba con él a través de mensajes de teléfono móvil para interesarse por el operativo
Sostiene que las pruebas de esos contactos se encuentran en los discos duros aún encriptados en poder de la justicia y que conocían el operativo hasta tres ministros del PP
Madrid
El comisario jubilado José Villarejo ha asegurado durante la tarde de este jueves en su comparecencia parlamentaria ante la comisión del Congreso de los Diputados que investiga la 'Operación Kitchen', que la cúpula del PP al completo incluido el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, estaba al corriente y tenía interés en el supuesto operativo secreto montado con fondos reservados, para hallar y destruir las pruebas que tuviera el extesorero del PP, Luis Bárcenas, que afectasen a la caja b de este partido y a sus dirigentes en la causa abierta por la Audiencia Nacional en 2013.
Villarejo ha manifestado que el mismo presidente Rajoy le contactaba "a través de un teléfono que comienza por 650 y termina en 10" y se interesaba de manera habitual en las pesquisas que llevara a cabo el operativo ilícito.
Las preguntas, según Villarejo, eran normalmente de corte "monosilábico" y Rajoy preguntaba "si era cierto que guardaba información en Baqueira", donde Bárcenas tenía su segunda residencia, o qué documentación podía guardar.
Villarejo ha dicho que quiere "creer" que el interés de Rajoy, además de por aquello que pudiera afectar al Partido Popular, también era debido a que creían que Bárcenas podía guardar "secretos que afectaban a altas magistraturas" de España. "Yo tuve contacto directamente con Rajoy", ha zanjado el policía.
El comisario jubilado ha realizado esta afirmación sin aportar prueba alguna. Sostiene que están guardadas en sus archivos personales, codificados en cuatro discos duros que se encuentran en poder del juzgado central de instrucción número 6 de la Audiencia Nacional.
José Villarejo afirma que llegó a quejarse al DAO, Eugenio Pino, por tener que informar al presidente del Gobierno, debido a que se veía obligado a reiterar el mismo resultado de las investigaciones a mucha gente.
Entre los que también estaban informados y conocían el alcance real de la 'Operación Kitchen', según Villarejo, se encontraban también el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, con quien "alguna vez" despachó el comisario jubilado; la exministra de Defensa y exsecretaria general del PP, María Dolores de Cospedal; y la vicepresidenta primera del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, a quien le interesaba el asunto por su ascendencia sobre el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y a quien reportaba novedades el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez. Otro de los cargos del PP implicados por Villarejo en el operativo ha sido el exdirector general de la Policía, Ignacio Cosidó, que fue quien le "captó" para intentar convencer al chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, y quien le recalcó que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tenía "mucho interés" en el caso.