Perú, el país con más muertos per cápita por COVID del mundo

Madrid

Perú ha estado entre los países de América Latina más afectados por la pandemia, con hospitales desbordados y con una demanda de oxígeno muy superior a la disponibilidad del país. El gobierno dijo que actualizaría las cifras de fallecidos, que hasta el domingo llegaban a 70.000, pero que no tenían pruebas suficientes para confirmar que todos ellos habían muerto por el virus o por alguna otra causa.

Una vez actualizados esos datos, la cifra oficial es de 180.764, casi tres veces más de lo que habían datado el domingo anterior, lo que lo convierte en el país con la tasa más alta de mortalidad per cápita, según la tabla que ofrece la Universidad John Hopkins.

Esa misma tabla muestra que Hungría tuvo el número más elevado de fallecidos per cápita, en torno a los 300 por cada 100.000 habitantes. Con las cifras actualizadas de Perú, allí se han producido 500 muertos por 100.000 habitantes.

La primera ministra peruana, Violeta Bermúdez ha dicho en rueda de prensa que "nuestro deber es hacer públicos los datos actualizados". Y estos datos lo que reflejan es que un número importante de muertos no fueron catalogados como causados por el COVID por falta de medios para su aseveración. Antes solo se consideraba que habían muerto a causa del coronavirus, los que habían recibido una prueba PCR positiva, pero desde entonces ya se han incorporado nuevos métodos de detección.

Los cementerios del país fueron llenándose de entierros, los hospitales compraron contenedores de refrigeración para que pudieran servir de morgues temporales, y esa multiplicación de fallecidos hicieron ver que la situación era mucho peor de lo que presentaban los datos oficiales.

En el continente americano, en el sur, Brasil es quien tiene el mayor número total de fallecidos por el COVID-19 con 450.000 muertos, pero por población el número de fallecidos per cápita es Perú, casi el doble que Brasil.

Las cifras actualizadas de Perú, se alinean con las denominadas cifras por exceso de muertes, que los investigadores usan para medir la posible subestimación durante la pandemia. Los datos de exceso de muertes miden el número total de muertes durante un periodo de tiempo y lo comparan con el mismo periodo antes de la pandemia.