Sánchez pide "magnanimidad" ante los indultos y dice que la carta de Junqueras es "bienvenida"
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido hoy a los ciudadanos catalanes y españoles que tengan 'comprensión y magnanimidad' ante los posibles indultos que pueda conceder el Gobierno a los presos del 'procés'
Buenos Aires
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido hoy a los ciudadanos catalanes y españoles que tengan "comprensión y magnanimidad" ante los posibles indultos que pueda conceder el Gobierno a los presos del 'procés' y ha asegurado que es "bienvenida" la carta del exvicepresidente catalán, Oriol Junqueras, porque es un paso en "favor de la distensión". No obstante, no ha querido pronunicarse sobre vetos en la Mesa de Diálogo, al ser preguntado si el líder republicano formaría parte de la misma.
Sánchez ha dicho comprender que los ciudadanos puedan tener reparos ante la "posibilidad" esta medida de gracia que puede adoptar el Gobierno de España, sobre todo pensando en los hechos acaecidos en 2017, con las leyes de desconexión, el referéndum ilegal y la declaración de independencia. El presidente, que ha realizado estas declaraciones durante una rueda de prensa con el presidente argentino en Buenos Aires, donde se encuentra de visita oficial, utilizaba así el mismo argumento que apuntó ayer la Portavoz del Gobierno María Jesús Montero, que también dijo entender los reparos de los ciudadanos, pero pidió confianza en el Gobierno.
En la misma línea se ha pronunciado Sánchez al pedir a los ciudadanos que tengan "confianza" en el Ejecutivo, así como "magnanimidad y comprensión" ante la medida de gracia para los presos del 'procés' que se prevé para antes del verano. Ha justificado esta petición en la "apuesta" que cree que debe hacerse por la "convivencia" y por la "reparación", ha dicho, de esos "errores que se cometieron en 2017".
"La sociedad española tiene que transitar de un mal pasado a futuro mejor", ha dicho Sánchez para acto seguido reprochar la herencia que ha recibido del Gobierno popular. "Eso implica también magnanimidad", ha remachado alegando que el desafío que hay por delante "merece la pena" porque es "sembrar convivencia" y superar la crisis de 2017 "pese a los reparos de la sociedad española", que ha admitido.
La carta de Junqueras, bienvenida
En este sentido, se ha referido a la carta de Oriol Junqueras en la que acepta los indultos y recalca, como ya hizo en 2019, que no se puede alcanzar una solución desde la unilateralidad, sino que el referéndum de independencia debe ser pactado. "A juicio del Gobierno de España cualquier paso a favor de la distensión es bienvenido", ha sentenciado Sánchez.
No obstante, no ha querido precisar si el exvicepresidente catalán, condenado por participar en el referéndum ilegal del 1-O, formará parte o no de la Mesa de Diálogo. "Me permitirá que no me pronuncie porque no me gusta vetar a nadie desde el punto de vista de la declaración pública", ha afirmado.
"Creo que no empezamos bien si ahora en la respuesta que yo le doy es que esta persona tiene que estar o no. Tenemos que trascender estos debates aunque entiendo la importancia para los medios", ha argumentado antes de advertir, no obstante, que todos son conscientes de que se habla de una "Mesa entre gobiernos".
No desvela fecha para la mesa
Pedro Sánchez tampoco ha querido precisar cuándo puede producirse la primera reunión de esa Mesa de Diálogo porque, ha insistido en que primero tiene que recibir en Moncloa al recién elegido presidente de la Generalitat "como mandan los cánones".
"Posteriormente veremos cuándo se celebra la mesa", ha recalcado Sánchez, quien, en cualquier caso ha insistido en que lo importante es trasladar el mensaje político de que la vocación del Gobierno es la de abrir un "nuevo periodo en Cataluña" que tiene que estar fundamentado en el diálogo, la negociación y el acuerdo y "siempre respetando los márgenes" de la "Constitución, la normalidad democrática y la seguridad jurídica".
Lo importante, ha insistido, es dar pasos en el camino de la distensión, de la convivencia y en la superación de una crisis que, ha admitido, fue "muy importante para el conjunto de la sociedad española y catalana en 2017".