El juez desconfía de Olivera: "Las grabaciones contradicen lo que ha dicho"
El juez de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, resta crédito al testimonio del exjefe de la UDEF y del CITCO, José Luis Olivera, imputado por formar parte del operativo para impedir la investigación contra la caja b del PP
Olivera admite que el traslado del inspector principal de las causas contra el PP se produjo para "mantenerle entretenido" con otros asuntos y dice que le pareció "una barbaridad"
El exjefe de la UDEF (Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal) José Luis Olivera (i) se dirige a la Audiencia Nacional para declarar en la Operación Kitchen, este lunes. / Isabel Infantes (EUROPA PRESS)
Madrid
El exjefe de la UDEF de la Policía Nacional y del CITCO, José Luis Olivera, ha intentado situarse como “una víctima” de toda esta situación y ha tratado de desacreditar al inspector Morocho, en su declaración como imputado en la Audiencia Nacional por formar parte, supuestamente, del engranaje que posibilitó el operativo Kitchen, de sustracción de pruebas a Bárcenas que pudieran perjudicar al PP o a sus dirigentes en el caso de su caja b.
Olivera ha negado que intentara comprarle con un jugoso destino para que no investigara la caja b del PP, que boicoteara investigaciones de la Gürtel o retrasara la presentación de informes perjudiciales para la formación conservadora.
No obstante, sí que ha concedido a preguntas del juez, Manuel García Castellón, que le pareció una “barbaridad” el traslado de Morocho del Grupo XXI de la UDEF a la Dirección Adjunta Operativa de la Policía Nacional mientras investigaba al PP. Ha afirmado que en su opinión, el movimiento obedeció a que pretendían “tenerle entretenido”.
Olivera también ha negado que conociera a Cospedal o a su marido, Ignacio López del Hierro. El hoy responsable de seguridad de la Federación Española de Fútbol, solo ha contestado a preguntas formuladas por su propio abogado y por el juez, quien a la finalización del interrogatorio, ha puesto en tela de juicio la credibilidad de su testimonio, al espetarle que debería revisar las grabaciones que obran en poder del sumario y en las que se escucha al propio Olivera, porque “contradicen casi todo lo que ha dicho” el imputado.
