¿Qué ha sido de los españoles que se colgaron medalla en Río 2016?
España obtuvo un total de 17 medallas en la última edición de los Juegos Olímpicos
Repasamos dónde se encuentran los medallistas de Río cinco años después
España acude a Tokio 2020 con la difícil tarea de intentar, al menos, igualar los grandes registros cosechados en los antecesores Juegos Olímpicos. La delegación nacional trajo de Río de Janeiro un total de 17 medallas, 7 de ellas de oro, lo que significaron unos registros superados solamente por los de Barcelona 92'.
Los protagonistas del 2016 se repartieron en diez disciplinas diferentes e incluso hubo algún repetidor en los podios. Alguno de ellos busca revivir la sensación de morder metal olímpico un lustro después, mientras que otros han readaptado sus vidas a cuestiones muy distintas. Uno a uno, repasamos qué ha sido de los españoles que saborearon la gloria en la última edición de los Juegos.
Mireia Belmonte, ante su propia marca
En Río de Janeiro, Mireia Belmonte marcó un antes y un después en la historia de la natación española al colgarse dos preseas (un oro y un bronce). Ahora como abanderada, su objetivo en Tokio pasa por coronarse nuevamente en la piscina y dejar atrás definitivamente una lesión de hombro que puso en duda su presencia en la gran cita del 2021. Siempre ha cumplido en las grandes citas en las que ha participado en estos cinco años, y es que su palmarés ha engordado con tres nuevas preseas mundialistas o seis en los Juegos Mediterráneos 2018.
Maialen Chourraut, una mamá para la historia
Leyenda en activo del deporte español como la primera española que ha sido medallista olímpica después de ser madre. Además, el trofeo de Maialen Chourraut en la cita brasileña resultó ser de color dorado. Por tanto, incentivos suficientes para que fuera nombrada como Mejor Deportista del Año 2016 por el Consejo Superior de Deportes. Sus descensos en eslalon han seguido paradójicamente una dinámica ascendente dentro de los Juegos y en Japón tiene la posibilidad de llevarse un tercer metal solo al alcance de una trayectoria impoluta. Un bronce en Londres y el oro de Río lucen ya en su palmarés.
La pareja de oro del tenis español
El abanderado español en Río de Janeiro logró subirse a lo más alto del podio en la categoría de dobles de tenis. Desde entonces, el legado de Rafa Nadal ha dado todavía más pasos al frente, entre los que destacan sobre todo seis nuevos títulos individuales de Grand Slam. No podrá brindar buenas noticias a la hinchada española desde Tokio, y es que el de Manacor ha rehusado participar por la carga física acumulada y la aparición de nuevas molestias esta campaña.
Su pareja en el éxito de 2016, todo un especialista en los dobles como Marc López, se encuentra inmerso en un final de carrera más discreto. Ahora compañero habitual de Feliciano López con 38 años, todavía ha engrosado su galería de trofeos con trofeos en ATP como el del Conde de Godó, en su propia casa.
La Olimpiada con cuentas pendientes de Lydia Valentín
La prueba de Río alzó a Lydia Valentín con un bronce en halterofilia que fue a su vez la primera experiencia de la berciana en su escalafón correspondiente en unos Juegos Olímpicos. En estos cinco años ha aprovechado para recoger los méritos que en su día le arrebataron los dopajes de sus rivales y ahora, también con la plata de Pekín y la plata de Londres en su posesión, enfila la posibilidad de erigirse como la primera levantadora de pesas que obtiene medalla en cuatro citas olímpicas diferentes. Dato alentador es que en este tiempo nunca se ha bajado del podio ni en los Mundiales ni en los Europeos en los que ha competido.
Palistas de élite
La disciplina que más alegrías brindó a la expedición española cinco años atrás fue el piragüismo en aguas tranquilas. Marcus Cooper Walz abrió el camino hacia el éxito con un K-1 impecable a los 1.000 metros que le otorgó la presea dorada. En adelante, el palista con orígenes alemanes se ha especializado en una distancia más corta y por equipos. A 500 metros, no ha cesado de acumular preseas continentales y mundiales tanto en K-2 como en K-4. En esta última categoría será en la que esté presente en Tokio 2020 en busca de reeditar un momento para el recuerdo.
Saúl Craviotto, también abanderado español en esta ocasión, fue en Río uno de los escasos privilegiados que volvió con dos preseas al cuello. Después incluso de participar activamente en la gestión del estado de alarma decretado por la pandemia de coronavirus como policía nacional, su meta vuelve a estar en medio del agua. Será también compañero de Marcus Walz Cooper en el K-4 que aspira a lo más alto. Ya es el español en activo con más metales olímpicos, pero en esta prueba tendrá la posibilidad de colocarse como el más laureado de toda la historia.
A Craviotto lo acompañó Cristian Toro en el K-2 que se adjudicó el oro en Brasil y desde entonces ha amarrado otros dos oros en torneos europeos y otras cuatro platas en campeonatos del mundo. Ello no ha bastado para entrar en la citación del equipo español para Tokio, convirtiéndose en uno de los ausentes más sonados por una decisión que ha suscitado polémica.
Desde Cuba hasta el Olimpo español
Un referente español originario de Cuba, acostumbrado a saltar obstáculos y protagonista de la acción que más ha unido al atletismo nacional en busca de justicia. Tras conseguir en Río una medalla olímpica pionera para la delegación de España en la disciplina de 110 metros vallas, Orlando Ortega se vio inmerso en la polémica final del Mundial de Doha 2019 en la que quedó fuera del podio por la interrupción de un corredor de la calle limítrofe, aunque las protestas del equipo dieron sus frutos y terminaron otorgándole un bronce mundial peleado incluso fuera de la pista. Ha demostrado sobradamente que en el campeonato español no tiene rival, y es que a su dominio ha sumado también trofeos en 60 metros vallas e incluso en la prueba lisa.
Teakwondistas sin reválida
La Olimpiada de Río de Janeiro a Tokio ha presentado numerosas complejidades para la teakwondista Eva Calvo. Plata en Brasil en la categoría de -57kg, ha querido dar un paso más allá intentando ser lo más competitiva posible en -67kg, pero en este camino de readaptación también han aparecido contratiempos inesperados que han frenado la progresión. Las trabas han sido tan grandes que han impedido que la de Leganés pueda defender su último puesto conseguido en la Villa Olímpica.
No ha corrido mejor suerte el bronce masculino en -68kg en 2016, Joel González. El catalán, que vivió su momento dorado en Londres 2012, no ha logrado los resultados mínimos requeridos para obtener el pase a los Juegos de Tokio y el pasado junio desveló su último paso en una trayectoria referente en el taekwondo español: su retirada. En su despedida con honores en la sede del Comité Olímpico Español, González aseguró incluso su temor por "el hueco que pueda haber detrás" de su marcha.
Carolina Marín, un lustro entre éxitos y enfermería
Carolina Marín alcanzó la cima del bádminton internacional al coronarse campeona olímpica en Río de Janeiro. Su enésimo éxito sirvió para rellenar su cuenta pendiente en una vitrina que ya había acogido todos los éxitos nacionales, continentales y mundiales. Llamada a marcar época en su deporte, su nuevo reto pasó por reafirmarse como la mejor jugadora de toda la historia y con ese foco puso la mira hacia Tokio. Una grave lesión en la rodilla derecha en 2019 hizo temer acerca de su estado tras la recuperación; unas dudas que, por otra parte, ella misma se encargó de dispersar regresando por la puerta grande y apuntando hacia un regreso triunfal a la Villa Olímpica que se frustró en el peor momento, con una nueva lesión de rodilla cuando sus entrenamientos ya iban dirigidos hacia la gran cita.
Un 'adiós' por todo lo alto de Ruth Beitia
La retirada de Ruth Beitia solo unos meses después de reinar en Río 2016 ha dejado al salto de altura femenino español huérfano de una figura realmente diferencial a niveles internacionales. Por su parte, Beitia ha reconstruido su vida lejos del deporte de élite en estos cinco años. Ocupó varios cargos políticos en el Partido Popular e incluso fue candidata a la presidencia de Cantabria, pero en 2019 pasó una nueva página para dedicarse a la docencia.
Doble metal para el baloncesto
Mujeres y hombres de la selección de baloncesto pusieron rumbo de vuelta a casa desde Río de Janeiro con preseas colgadas al cuello. Ellas sumaron una plata que supo a oro y la generación no ha cesado de brindar nuevas alegrías al país. Terceras clasificadas en el Mundial 2018, ya han dejado fuera de toda duda su absoluto dominio en Europa después de obtener en 2019 su tercer campeonato europeo en apenas seis años. Su idilio con los trofeos volverá a ser puesto a prueba en Tokio.
Ellos retornan al lugar donde se erigieron por primera vez con un Mundial allá por el año 2006. Desde su plata en 2016, el equipo también ha malacostumbrado a la afición sumando un metal tras otro. Precisamente en este periodo han sumado su segundo título mundial, un aliciente más que suficiente para creer en subirse por primera vez a lo más alto del podio olímpico.
Alejandra Quereda, del tapiz al banquillo
El último día de competición de Río 2016 trajo, entre otras cosas, una nueva plata para la delegación española de la mano del ejercicio grupal de gimnasia rítmica. Sandra Aguilar, Artemi Gavezou, Elena López, Lourdes Mohedano y Alejandra Quereda fueron las artífices entonces del golpe en la mesa de una España siempre guerrera hasta la fecha en esta disciplina. Un lustro más tarde, la realidad ha mutado de manera radical y es ahora precisamente Alejandra Quereda quien ha asumido las riendas como seleccionadora de la reconstrucción de un equipo necesitado de un relevo generacional competitivo. Por primera vez en la historia de los Juegos, las españolas no aportarán ninguna participante a Tokio 2020, poniendo el punto de mira en París 2024.
Carlos Coloma, el último medallista
Tokio 2020 se antojaba con el sueño de Carlos Coloma de retirarse después de una competición irrepetible. Para el riojano, además, con la connotación especial de haber sido en unos Juegos donde tocó el momento álgido de su carrera después de agenciarse en Río de Janeiro la última presea del combinado español, un bronce en ciclismo de montaña. No obstante, cuando más cerca estaba la fecha nipona, el ciclista sorprendió anunciando su despedida al deporte profesional para afrontar un nuevi rol dentro del mundo de las 'Mountain Bikes'. Desde entonces, Coloma es entrenador del equipo BH Templo Cafés.