El desafortunado 'vuelo' de Van der Plaetsen, el belga que luchó contra todo antes de estar en Tokio

Hay imágenes que forman parte de la intrahistoria de los Juegos Olímpicos y que no tienen a una medalla o a un medallista como protagonista. Es el caso de la que ha tenido este miércoles como actor principal al belga Thomas Van der Plaetsen, que ha sufrido una aparatosa caída durante la prueba de salto de longitud de la competición de decatlón.

El deportista se ha desequilibrado en el momento del salto y ha caído de bruces en el foso. Durante unos segundos ha permanecido tendido en el suelo sobre la arena, de la que ha salido rodando por el suelo para terminar abandonando la pista en silla de ruedas.

Han sido unos segundos impactantes y que han dado la vuelta al mundo a través de las televisiones y las redes sociales. Quizá porque Thomas Van der Plaetsen no es un deportista cualquiera, sino un atleta que se ha tenido que enfrentar a numerosas dificultades antes de llegar a una cita tan importante como unos Juegos Olímpicos.

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El belga, de 30 años, fue acusado de dopaje en sus primeros años. Había dado niveles anormales de la hormona HGC y quedó ante el mundo como un tramposo. En principio, esta hormona que produce la placenta durante el embarazo está presente en productos que se comercializan para perder peso.

Lo peor para él es que esos niveles respondían a un cáncer testicular. Solo tres años antes, Van der Plaetsen había perdido a su padre por un cáncer de páncreas. Después de pasar por el quirófano y someterse a quimioterapia, el belga quiso reaparecer hasta que logró participar en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, donde acabó en la octava plaza.

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Desde entonces ha sido muy activo en tareas de concienciación sobre el cáncer mientras ha logrado seguir con su carrera deportiva. Si principal victoria hasta ahora se produjo en el Europeo de Atletismo de 2016.