La Fiscalía acusa a los CDR de pertenencia a organización terrorista
El fiscal considera acreditado que sus "proyectos terroristas" estaban en un "avanzado grado de preparación" y contaban con objetivos claros como tomar el Parlament de Cataluña
Madrid
La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha pedido el procesamiento por pertenencia a organización terrorista de los 9 miembros de los CDR detenidos en 2019 por planear sabotajes y atentados como respuesta a la sentencia condenatoria del Tribunal Supremo a los líderes del 'procés'.
El escrito firmado por el teniente fiscal, Jesús Carballo, considera acreditado que sus "proyectos terroristas" estaban en un "avanzado grado de preparación", pues ya tenían "objetivos seleccionados", como ocupar el Parlament de Cataluña.
Subvertir el orden constitucional
Los CDR , relata en su escrito el fiscal, "son grupos compuestos por una pluralidad de personas que tendrían como objetivo subvertir el orden constitucional de forma material, mediante una estrategia planificada y organizada".
Dicha intención se manifiesta a través del rechazo a seguir los cauces legalmente establecidos por el Estado de derecho para las reivindicaciones políticas y sociales, y la apelación directa a la desobediencia y a la ejecución de acciones de características habitualmente tumultuarias que pretenden imponer una realidad de hechos consumados mediante la toma de control del territorio y la afectación de sectores estratégicos económicos y de abastecimiento.
Gran radicalidad
El denominado Equipo de Respuesta Táctica, es una célula integrada por los investigados tratándose de un grupo reducido de individuos de diferentes CDR, que evidencian una gran radicalidad. La creación de esta célula viene motivada por la necesidad de contar dentro de la estructura de los CDR, con un grupo clandestino de individuos de la máxima confianza y que se muestran totalmente entregados a “la causa”, habiéndole sido encargadas la realización de las acciones más sensibles.
Los investigados, todos ellos, comparten principios ideológicos favorables a la independencia y el activismo radical para conseguirla; su objetivo final como organización era conseguir la independencia de Cataluña, empleando para ello la violencia en su máxima expresión, forzando con ello, de modo coercitivo, a las instituciones a conceder por la vía de los hechos la separación de Cataluña del resto de España.
Los miembros del ERT han tenido participación activa en la materialización de algunas de las acciones más contundentes que han llevado a cabo los CDR hasta la fecha (cortes de carretera, vertido de aceite la calzada de la C-55 en un lugar de paso obligatorio de la comitiva que trasladaba los presos desde el Centro Penitenciario de Lledoners, levantamiento de las barreras de los peajes,
CNI catalán
Los investigados como miembros del ERT participaron en la creación y desarrollo de los CECOR (centro de coordinación) para las acciones de los CDR, asumiendo el encargo recibido de un denominado 'CNI Catalán' para que aportasen la infraestructura logística necesaria con el objeto de acometer una acción en la que se pretendía ocupar el Parlament de Cataluña, y defenderlo posteriormente, todo ello dada la capacidad técnica y humana del citado grupo, debido a que para realizar los mismos, serían necesarios importantes conocimientos en redes ilícitas y clandestinas securizadas de telecomunicaciones, así como una importante capacidad de movilización.
Atrincherarse en el Parlament
Como detalles acreditados del citado plan, precisa la Fiscalía, "la ocupación se realizaría por la puerta principal del Parlament ya que, supuestamente, se les facilitaría el acceso desde el interior". Junto a un reducido grupo de personas, cooperarían con el tal grupo denominado 'CNI', y se encargarían del alquiler de inmuebles y locales que les proporcionasen seguridad y el establecimiento de bases de 'intendencia', para permanecer en el interior del edificio al menos una semana, montando antenas de larga distancia para mantener las comunicaciones, todo ello bajo un presupuesto estimado en 6.000 euros.
Control de comunicaciones
Para ello, serían esenciales los servicios del investigado Ferrán Jolis, debido a sus amplios conocimientos en el apartado informático y de telecomunicaciones, a efectos de confeccionar una red securizada e indetectable que permitiese las comunicaciones entre el interior y exterior del Parlament.
De este modo, los investigados, aprovechándose de los contactos propiciados en el seno de la militancia en los CDR, se constituyeron en una célula que elevaba la intensidad y la naturaleza de las acciones llevadas a cabo, a un nivel superior.
Terrorismo estable
Añade la Fiscalía que "Los investigados, como miembros del ERT, habrían superado la actividad dentro del respectivo CDR y conformado una organización terrorista paralela, de carácter clandestino y estable, cuyo objetivo sería el de llevar a cabo acciones violentas o atentados contra objetivos previamente seleccionados utilizando para ello los explosivos y/o sustancias incendiarias fabricados en los dos laboratorios clandestinos que la propia organización tenía instalados en dos domicilios particulares".
Destacados
La Fiscalía relata a lo largo de 43 páginas, la intervención pormenorizada de cada una de las 9 personas para quienes solicitará la apertura de juicio.
Según el relato del fiscal, "dentro de la organización terrorista ejercía un papel fundamental de dirección, coordinación, dinamización y planificación de las actividades del grupo, con una fuerte ascendencia sobre algunos de los miembros de la organización y con un papel dirigente que desarrollaba en las acciones en las que participaba, como la desarrollada para impedir el traslado de los presos de la Causa Especial 20907/2017[1]. Es decir, no solo se acredita su pertenencia a los grupos de acción, sino además su intención de realizar acciones violentas como cortes de autopista, ocupación de edificios simbólicos, bloqueo del aeropuerto y movilizaciones generales, con la voluntad de subvertir el orden público y la paz social con acciones contra infraestructuras criticas como son las vías de comunicación (autopistas y aeropuerto), así como su implicación no solo en la ejecución, sino también en la labor de dirección y organización en todo ello".
La Fiscalía precisa que "como el resto de investigados, Esther ha mantenido un marcado activismo radical con su pertenencia al CDR, en este caso en la localidad barcelonesa de Mollet del Vallés. Su papel en la organización no se circunscribe únicamente al conocimiento de la existencia de los hechos que se estaban desarrollando en el “laboratorio clandestino" ubicado en el domicilio de Alexis Codina Barberán, sino que su participación en las actividades ilícitas de la organización terrorista se encuadraban en el ejercicio de un papel fundamental de dinamización, dirección, planificación y coordinación de aquellas. Su figura es un referente o enlace de coordinación entre los diferentes grupos e individuos que tendrían el cometido de llevar a cabo acciones subversivas de alto nivel.
Javier Álvarez
Ha desarrollado la mayor parte de su carrera en La Cadena SER donde esta vinculado a la sección de Justicia...