La Guardia Civil desmonta el bulo más extendido sobre sus perros

Madrid

¿Alguna vez te habías preguntado cómo se entrena a un perro para que pueda detectar droga durante un operativo? A pesar de que en alguna ocasión hayas escuchado que los diferentes cuerpos de policía les dan todo tipo de drogas para que sean capaces posteriormente de detectarlas, principalmente en chascarrillos que te han contado o a través de las redes sociales, lo cierto es que es un bulo que no te deberías creer.

Dado que no son pocas las personas que tienen este tipo de creencias, la Guardia Civil ha aprovechado su influencia en redes sociales para desmontar este bulo. Todo ello a través de un tuit en el que explican, tirando de ironía, que si a sus perros antidroga les dieran droga para entrenarlos, también deberían darle explosivos a los canes que localizan explosivos o veneno a quienes rastrean todo tipo de cebos: "Los preparados para buscar dinero nos arruinarían continuamente".

Así entrenan a los perros antidroga

La caja en la que se encuentra el juguete esconderá también un paquete de droga. De esta manera, el animal será capaz de detectar el olor y asociarlo al juguete. Gracias a ello, y en futuras operaciones antidroga, el animal tratará de localizar la droga para encontrar su juguete. De hecho, y cuando el animal complete con éxito su misión, recibirá el juguete que tanto estaba buscando. Por lo tanto, el animal asocia el hecho de buscar droga a un juego que tiene como premio final disfrutar de su juguete favorito.

Pueden entrenar hasta cinco horas al día

Según explican en el blog especializado Mis Animales, estos perros pueden entrenar hasta cinco horas diarias con el objetivo de ser lo más precisos posibles a la hora de detectar la droga. A pesar de que trabajarán principalmente con el juego que te hemos explicado con anterioridad, también llevarán a cabo otro tipo de ejercicios para mantenerse en condiciones óptimas para cualquier servicio.

Por lo tanto no, los perros no reciben ningún tipo de droga a la hora de ser entrenados. Tan solo le impregnan una imitación del olor de la sustancia ilícita al juguete con el que va a jugar el animal y se le esconde en una caja cerrada. De esta manera, y lo que para ellos es un simple juego, es una herramienta de lo más precisa para detectar cualquier actividad sospechosa.