Deja su moto en un taller y descubre que han estado circulando con ella a 222 km/h
"Me dijeron que había salido un mecánico a probarla", afirma el propietario del vehículo a 'La Gaceta de Salamanca', denunciando que es un delito contra la seguridad vial
Madrid
Cuando se te rompe o se te estropea algo, el gesto más normal es llevarlo a un taller o a una tienda de reparación, depositando toda la confianza en los expertos para que logren solucionar el problema. Sin embargo, un conductor precavido de Salamanca ha logrado averiguar que su moto no estaba siendo usada como él creía en el taller en el que la había dejado. Su vehículo tenía un problema de velocidad de crucero y decidió llevarla para que se lo arreglaran. Sin embargo, para su sorpresa, al día siguiente detectó que su moto había estado en circulación y a nada menos que 222 km/h, es decir, estaban cometiendo un delito contra la seguridad vial a su costa.
La víctima, como informa La Gaceta de Salamanca, ha puesto una denuncia ante la Guardia Civil para que no quede como que ha sido por un acto imprudente suyo ni se considere que él ha sido el responsable. El propio afectado ha relatado al medio que el pasado 6 de septiembre llevó su moto al taller, a un concesionario oficial, y la dejó allí. Sin embargo, cuenta con un dispositivo antirrobo instalado y le ha sido tremendamente útil en esta ocasión.
Deja su moto en el taller y el mecánico comete un delito
Al día siguiente, el martes por la tarde, detectó que alguien la había estado utilizando en un punto de la A-50. Como en teoría estaba en el taller, la explicación más lógica era que hubiera sido alguien de allí, algo que le confirmaron. "Llamé al taller para ver cómo iban, si habían solucionado la avería, y me dijeron que no sabían, que había salido un mecánico a probarla", explica.
Extrañado por lo ocurrido, optó por denunciarlo a la Guardia Civil: "Ya no es la multa que me pueda llegar, es que esto es delito y yo soy funcionario público. Lo primero que harían sería echarme". "Tengo la copia de la orden de reparación de un día antes, lo que prueba que en ese momento la moto no estaba en mi poder", añade a La Gaceta.
Este medio recoge también la versión del concesionario, como respuesta al motorista, que es que tendría una sanción a nivel interno por circular a esa velocidad y que se disculparían con una llamada. "No hacía falta poner la moto a esa velocidad para ver si seguía la avería o no porque ese problema lo daba a 50 km/h", razona, sin encontrar explicación a lo ocurrido con su moto.