La Fiscalía notificó al rey emérito que le estaba investigando antes de que presentara su regularización
El País publica esta mañana que la Fiscalía notificó al rey emérito la apertura de cada una de las tres investigaciones que se llevan a cabo
El rey emérito, en una imagen de archivo. / GETTY IMAGES
Madrid
El País publica esta mañana que la Fiscalía notificó al rey emérito la apertura de cada una de las tres investigaciones que se llevan a cabo. En concreto fue el teniente fiscal del Tribunal Supremo Juan Ignacio Campos, quien hizo el comunicado. Las comunicaciones se produjeron en junio, noviembre y diciembre de 2020 a través del abogado del anterior jefe del Estado, Javier Sánchez-Junco, según el periódico que cita fuentes de la investigación. Además, en cada uno de los escritos, de los que consta acuse de recibo, se le invitó a personarse en las diligencias, pero el rey emérito no lo hizo en ninguno de los tres casos.
Las dos primeras notificaciones se produjeron antes de que, el pasado 9 de diciembre, el letrado de Juan Carlos I hiciera público que este había presentado "sin requerimiento previo", una regularización fiscal "por importe de 678.393,72 euros, incluyendo intereses y recargos"; mientras que la tercera se realizó con carácter previo a la segunda regularización que, por valor de casi 4,4 millones, tuvo lugar en febrero de este año.
Las notificaciones pueden invalidar el efecto de las regularizaciones
Explica el periódico que el hecho de que la notificación se produjera antes de la regularización es muy relevante ya que existe la posibilidad de que este hecho invalide el efecto que perseguía como exonerarse de un posible delito fiscal. Cita el artículo 305.4 del Código Penal que señala que la regularización neutraliza la acción penal siempre y cuando "se haya procedido al completo reconocimiento y pago de la deuda tributaria antes de que por la Administración Tributaria se le haya notificado el inicio de actuaciones de comprobación o investigación"; o antes de que el Ministerio Fiscal "interponga querella o denuncia" o "realice actuaciones que le permitan tener conocimiento formal de la iniciación de diligencias".
En las notificaciones, se invitaba al letrado a personarse en las diligencias para defender los derechos de su cliente, pero Javier Sánchez-Junco, no lo hizo. De haberse personado, habría accedido al contenido de la investigación y no habría podido alegar desconocimiento. Se trataba de un desconocimiento formal ya que través de la prensa, se conocía cuál era el objeto de las diligencias abiertas por la Fiscalía.
