Los neumólogos confirman la relación entre la exposición a la contaminación y la muerte por COVID-19
Se trata de un estudio con 1.548 pacientes con la enfermedad reclutados durante el primer pico de la pandemia, entre febrero y mayo de 2020

Contaminación en Madrid / Getty Imágenes

Madrid
La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) alerta de que la exposición crónica a la contaminación urbana aumenta la probabilidad de muerte por COVID-19, según los resultados de un estudio inédito.
Se trata de un estudio de una cohorte de 1.548 pacientes con COVID-19 reclutados durante el primer pico de la pandemia, entre febrero y mayo de 2020. Han participado en la investigación el Hospital Universitario Cruces y el Hospital de Galdakao, ambos en la provincia de Vizcaya; el Hospital La Fe, de Valencia; y el Hospital Clínic, de Barcelona.
En esta investigación, se incluyeron ingresos por neumonía SARS-CoV-2 en el primer pico epidémico de Covid-19 (febrero-mayo 2020). Se utilizó un modelo matemático para estimar el nivel diario de contaminante en cada código postal, en función de las coordenadas geográficas y la altitud de las estaciones de medición. Así, se determinó la exposición crónica en 2019 y la aguda como la exposición en los 7 días anteriores al ingreso.
Tras realizar ajustes por edad, sexo y comorbilidades, se ha visto que un incremento a largo plazo de la exposición a partículas contaminantes como las PM10 y el dióxido de nitrógeno (NO2) empeora el pronóstico de los pacientes con COVID y también produce más riesgo de muerte por esta enfermedad.
Las PM10 son partículas finas presentes en el aire contaminado que entran y se acumulan en los pulmones y, en referencia a estas partículas, en este estudio se ha visto que la exposición aumentada a 10 microgramos por metro cúbico de PM10 eleva un 10,5 por ciento la probabilidad de muerte por COVID-19.
En el caso del NO2, por cada incremento de 10 microgramos por metro cúbico (media anual) la probabilidad aumenta un 35,7 por ciento para la exposición crónica y un 62,9 por ciento para la exposición aguda.




