El rey honra la memoria de las víctimas de ETA y agradece la labor de las fuerzas armadas
Felipe VI expresa su "orgullo, aprecio y gratitud" por "la fuerte vocación de servir" demostrada por las Fuerzas Armadas
Reivindica "la memoria y dignidad de las víctimas del terrorismo" al cumplirse diez años del fin de ETA
Madrid
El rey ha recordado este jueves la "memoria y dignidad" de las víctimas de ETA y ha enviado "un mensaje de ánimo y admiración" a sus familias, cuya "fortaleza y altura moral" ha asegurado que "sirve de guía" a todos los españoles.
Felipe VI ha tenido estas palabras de recuerdo para las víctimas del terrorismo durante la celebración de la Pascua Militar en el Palacio Real de Madrid, un acto castrense marcado de nuevo por la pandemia que este año cumple el 240 aniversario de su creación por el rey Carlos III.
Coincidiendo con el décimo aniversario del cese de "la brutal violencia" de la organización terrorista, el rey ha recordado "con gran emoción" a las víctimas de ETA -muchas de las cuales ha recordado que pertenecían a las Fuerzas Armadas y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado- y ha enviado un mensaje "de ánimo y de admiración" a sus familias. "Su fortaleza y altura moral nos sirve de guía a todos los españoles", ha ahondado.
También ha recordado el décimo aniversario del cese de la violencia terrorista la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien ha reconocido que la sociedad tendrá siempre "una impagable deuda de gratitud" con ellos y sus familias.
"Aprecio y gratitud" a las fuerzas armadas
El rey ha expresado además su "orgullo, aprecio y gratitud" por "la fuerte vocación de servir" demostrada por las Fuerzas Armadas (FAS) durante el pasado año en favor de la ciudadanía ante catástrofes como el volcán de la Palma, la pandemia o el temporal Filomena, lo que pone de relieve que son "fiel reflejo de la sociedad".
La respuesta dada ante las emergencias ocurridas en los últimos meses evidencian, en opinión del jefe del Estado, "la voluntad, determinación y solidaridad" de los militares. "Son, en definitiva, fiel reflejo de nuestra sociedad. Su compromiso está siempre guiado por la entrega a España y por una fuerte vocación de servir, que encuentra su guía y su constante estímulo moral en los principios y valores recogidos en las Reales Ordenanzas y al amparo de nuestro ordenamiento constitucional", ha subrayado.
Desde "el mutuo respeto y la lealtad, el compañerismo, el sentido de la justicia y de la total dedicación" por parte de los uniformados despierta en el conjunto de la sociedad, según Felipe VI, "un sentimiento legítimo de admiración y aprecio". "Sentimiento que, cada año, se refuerza gracias a la eficacia con la que cumplís vuestras misiones, y también por la cercanía y la ejemplaridad con las que lo hacéis", ha añadido.
En su elogio, el rey ha citado la labor ante la emergencia del volcán de la Palma; en la crisis sanitaria por la covid-19 al colaborar en el rastreo de los contagiados y en la vacunación; en las inundaciones por los temporales; en los daños causado por la borrasca Filomena y en los incendios del pasado verano.
En todos estos escenarios, Felipe VI ha incidido en que las FAS han constatado su "entrega y versatilidad" para responder con premura.
"Quiero expresaros el orgullo de la sociedad española hacia la institución militar. Es, sin duda, la mejor recompensa e implica aprecio y gratitud hacia vuestro trabajo y vuestros valores", ha enfatizado.
El rey ha reconocido también la tarea de los 2.700 miembros de las FAS y de la Guardia Civil que están desplegados en operaciones de paz en el extranjero.
Se ha detenido en la de Afganistán, que llegó a su término el pasado año tras casi dos décadas de despliegue el país asiático, y ha alabado la contribución de los militares en el operativo de evacuación de los colaboradores afganos.
Felipe VI ha considerado pertinente analizar con los países aliados los resultados finales de la misión en Afganistán para "extraer las necesarias lecciones y enseñanzas".
Sobre la próxima cumbre de la OTAN, que España acogerá en junio de este año, don Felipe ha asegurado que supone un "reconocimiento al compromiso" con la Alianza Atlántica y al "extraordinario" papel de los soldados en las distintas operaciones de paz.
Como respuesta a su tarea, el rey ha reclamado para los militares "la atención que requieren, en su propia seguridad y en sus necesidades y desvelos".
"Lo merece su entrega a nuestra defensa y su sacrificio por el bien común de todos los españoles. Su esfuerzo personal es clave, además, para mantener el intenso nivel de actividad que realizamos", ha ensalzado.
Antes de concluir, don Felipe ha trasladado a los militares que siempre contarán con "el permanente apoyo de la Corona y de la sociedad española".
Como el pasado año, la ceremonia de la Pascua Militar ha visto reducido notablemente el número de asistentes en el Salón del Trono, donde sólo han estado las autoridades y los 16 condecorados de las FAS y la Guardia Civil, y se ha suprimido el cóctel posterior.
Tampoco ha habido público en la parada militar con la que ha comenzado el acto en la Plaza de la Armería.