'Wordle', el juego estilo crucigrama que ha pasado de 90 usuarios a más de 300.000 en apenas dos meses
Su simpleza es su mayor aliado: un enlace sin publicidad, una palabra de cinco letras a adivinar y seis intentos para hacerlo
Tan solo se puede jugar una vez al día y cuenta ya con versiones en catalán y en gallego, además de castellano e inglés
Madrid
Cinco letras, seis intentos y una única palabra por descubrir cada día: esta es la fórmula de 'Wordle', un juego de apariencia sumamente simple pero que, sin embargo, se ha vuelto viral en las últimas semanas y decenas de miles de usuarios comparten sus resultados diarios en redes sociales.
La mecánica de este divertimento, que se podría considerar una mezcla entre un crucigrama y el juego de mesa Mastermind, es simple: el objetivo es descifrar una palabra de cinco letras en seis intentos. En cada uno de ellos aparecerán las letras de un determinado color. En verde si la contiene y además se encuentra en su orden correcto, en amarillo si la palabra contiene esa letra pero en una posición diferente y en gris si la letra no está.
Una de las claves de su éxito es que para todos los usuarios es la misma palabra para encontrar todos los días y en caso de fallar se debe esperar al día siguiente. Por tanto, los usuarios comparten en redes sus resultados para comparar con los demás y averiguar si han utilizado los mismos intentos.
Además, otra de las ventajas con las que cuenta es simplemente una dirección web a la que entras y juegas, nada más. No se puede descargar, no pide datos, no tiene anuncios, no envía notificaciones, no ofrece compras dentro del juego y no hay niveles que subir ni pantallas que desbloquear. Una partida diaria es el máximo que se puede jugar.
Según el New York Times, el 1 de noviembre, 90 personas intentaron encontrar la palabra del día. Dos meses después, el 2 de enero, superaban los 300.000. Además, su creador, el estadounidense Josh Wardle, señaló este mismo medio: "Creo que la gente aprecia que exista algo online que sea simplemente divertido. No trata de hacer nada turbio con tus datos o tus ojos. Es sólo un juego entretenido".
En origen, este juego fue diseñado por Wardle a modo de pasatiempo para su pareja, la cual era fiel usuaria de los crucigramas que se encuentran en las últimas páginas de los periódicos. Ella comenzó a jugar y fue poco a poco compartiéndolo con algunos familiares y amigos, hasta que finalmente se extendió y ahora ya cuenta con versiones en catalán y en gallego, además de castellano e inglés.