El Supremo de Estados Unidos bloquea el mandato de vacunación para empresas de Biden
La inoculación sí será obligatoria para el personal de aquellos centros sanitarios que reciben fondos federales, según este mismo tribunal
Joe Biden, presidente de Estados Unidos. / GettyImages
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Madrid
El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha dejado sin efecto este jueves el mandato del presidente del país, Joe Biden, que obligaba a vacunarse o a presentar semanalmente resultados negativos de tests de COVID-19 a los empleados de todas las compañías que tengan 100 trabajadores o más.
La orden presidencial debía empezarse a implementar en febrero. El Tribual sí dio luz verde, sin embargo, a otro mandato de Biden para que se vacunen los empleados de más de 50.000 instalaciones sanitarias de EEUU, aquellas que reciben subsidios federales de los programas Medicare o Medicaid, en las que trabajan unos 17 millones de personas.
Biden ha abogado por seguir avanzando en la campaña de vacunación, ya que con las vacunas se ha prevenido de forma "abrumadora" que la actual ola de contagios haya desembocado en un dato inasumible de fallecidos o enfermos graves, y también por universalizar las medidas de prevención más básicas.
Biden: "A todos nos gustaría dejar de llevar mascarillas"
Junto con su decisión de imponer la vacunación obligatoria en determinados sectores, el presidente estadounidense ha anunciado que su Gobierno adquirirá otros 500 millones de test con el objetivo de distribuir gratuitamente un total de mil millones de pruebas entre la población nacional, a lo que se sumará también un reparto aún por especificar de mascarillas de "alta calidad".
"Sé que a todos nos habría gustado dejar de llevar mascarillas. Lo entiendo, pero es una herramienta muy importante para evitar los contagios", ha dicho Biden ante la escalada sin precedentes de la pandemia que se está viviendo especialmente en los hospitales.
La cifra de enfermos de COVID-19 ingresados en Estados Unidos supera ya el umbral de los 150.000, un dato inédito desde que comenzó la pandemia. La expansión de la variante ómicron del coronavirus ha hecho que el país norteamericano registre unos 750.000 nuevos casos de media cada día en la última semana, según la Universidad Johns Hopkins.
